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Alegan fraude en elecciones de 1961

El domingo 3 diciembre de 1961 se celebraron elecciones municipales y de diputados al Congreso por la capital y los municipios del departamento de Guatemala, en medio de un panorama político incierto caracterizado por el fraude.

Comicios legislativos y municipales de 1961. Votantes en Belén. (Foto: Hemeroteca PL)

Comicios legislativos y municipales de 1961. Votantes en Belén. (Foto: Hemeroteca PL)

Después de las elecciones, la alianza entre el Partido Reconciliación Democrática Nacional (PDRN, Redención); Movimiento Democrático Nacional (MDN), y Partido de Unidad Democrática (PUD) ocupó 50 de los 66 escaños. La participación electoral no superó el 44.48 por ciento.

El martes 5, Ricardo Estrada Aguilar, director de Redención,  pidió al Tribunal Electoral (TE) la nulidad total de los comicios, por considerar que en centros de votación se había hecho propaganda a favor del Movimiento de Liberación Nacional (MLN) y el Partido Revolucionario (PR).

Estos dos últimos partidos luchaban contra el entonces presidente Miguel Ydígoras Fuentes, fundador de Redención.  Fue una contienda entre anticomunistas.

El miércoles 6, el TE declaró sin lugar la nulidad, debido a que los magistrados argumentaron que la petición fue hecha fuera de tiempo. Otras acciones similares habían sido rechazadas por esa entidad.

Marco legal

El tribunal electoral tomó tal decisión con base en el párrafo segundo del artículo 90 de la ley electoral, que indicaba que si se trataba de nulidad de votos, la acción debía presentarse dentro de las 24 horas siguientes al cierre de la votación; en caso de otras nulidades, dentro de los tres días de haberse notificado el escrutinio.

Estrada Aguilar señalaba que varios diarios habían hecho propaganda a favor del MLN y el PR. También denunció que no se había permitido votar a 2 mil seguidores del partido oficial en el Instituto Nacional Central para Varones y la Escuela de Ciencias Comerciales; además, dijo que en varios municipios faltaron papeletas electorales.

Finalmente, los comicios fueron ganados por los opositores, en un claro desafío al oficialismo. Lo irónico de la política de entonces eran las alianzas casi secretas que se fraguaban entre los partidos de derecha. Así, de un partido viejo surgía otro “nuevo”, que no era otra cosa que la recomposición, acomodo o reciclaje de los partidos anteriores.

Además, era el auge del militarismo, como un resurgimiento paradójico luego de la Revolución de 1944. La caída de Jacobo Árbenz y el asesinato de Carlos Castillo Armas confirmaron aún más la rivalidad entre militares.

Datos de interés

Para las elecciones a diputados y alcaldes del departamento de Guatemala  fueron abiertas 127 mesas. Un detalle particular es que los datos fueron procesados por las entonces veloces máquinas IBM, instaladas en la comuna capitalina.

Curiosidades de Ydígoras

José Miguel Ramón Ydígoras Fuentes (Retalhuleu, 17 de octubre de 1895 – Ciudad de Guatemala, octubre de 1982) fue un político y militar guatemalteco. Ydígoras Fuentes estuvo en el exilio tras el derrocamiento de Federico Ponce Vaides y luego intentó afanosamente conseguir patrocinio para derrocar el gobierno del coronel Jacobo Árbenz Guzmán.

Tras el triunfo del Movimiento de Liberación Nacional en 1954, fundó el Partido Redención y fue presidente de Guatemala del 2 de marzo de 1958 al 31 de marzo de 1963, cuando fue derrocado por un golpe de estado.

Se decía de Ydígoras Fuentes que era un “loco” o un “payaso”, pero lo que sucedía era que tenía un gran sentido del humor y se reía de muchas cosas que otros tomaban muy en serio. Fue un hombre de gran ilustración, que leía con afán.

Muchas personas de los sectores económicos poderosos de Guatemala le criticaban porque durante su campaña electoral había prometidos dos cosas: que todos los guatemaltecos “iban a poder tener un pollo en sus ollas” y que iba a gobernar con “mano de acero inoxidable”, pero únicamente pudo cumplir lo primero porque se abarató la carne de pollo gracias al incremento en las industrias para la crianza de pollos, pero no así lo segundo porque no tenía vocación dictatorial.

Durante su gestión como mandatario hizo astutas alianzas con la entonces considerada extrema derecha, por su inclinación anticomunista. Sin embargo, también tuvo que luchar contra los adversarios de su propia ideología, entre quienes encontró a sus peores adversarios y sus mejores aduladores.

Un ejemplo de lo anterior es que fue derrocado por Enrique Peralta Azurdia, su ministro de la Defensa.

Para calmar los ánimos de la población desesperada de sus abusos, pidió a Juan José Arévalo que regresara al país y se postulara para las elecciones de 1964. La cúpula del Ejército se opuso y lo derrocó el 30 de marzo de 1963.

Jornadas de marzo de 1962, contra Miguel Ydígoras Fuentes. (Video: tomado de Youtube)

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