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Siguiendo los protocolos, se alertó a varias unidades militares que se movilizaron al lugar donde aterrizaría la aeronave, en la comunidad Vista Hermosa, en Ixcán, Quiché.
El avance de la incursión militar se detuvo porque un grupo de vecinos, supuestamente de la comunidad, armados con machetes y palos impidieron el ingreso de los soldados al área.
Según la información oficial, mientras la unidad militar dialogaba con los pobladores se detectó en la plataforma de radar como en varios picops se cargaba desde la avioneta varios paquetes, posiblemente droga.
Los vehículos cargados con el supuesto ilícito, según el radar, salieron del área por el lado opuesto de donde se encontraba la patrulla militar con los pobladores, rumbo a México, donde cruzaron hacia ese país.
Finalmente, los pobladores dejaron libre el paso a los militares que llegaron al área, pero solo encontraron el avión en llamas y otros vehículos que quedaron abandonados.
