Steven Castañeda, director de la escuela, indicó que han sido víctimas de robo constantemente, y que cada vez que compran o reciben donaciones de focos o lámparas, desconocidos las roban por la falta de seguridad.
“En esta ocasión, los delincuentes se llevaron cuatro lámparas industriales y dañaron una de las bases, la cual puede caer en cualquier momento y un estudiante o un docente podría resultar herido”, expresó Castañeda, quien agregó que a pesar de que la escuela está en el área del centro, los saqueos son constantes.
Añadió que como medida de prevención, quitaban las luminarias de las aulas cuando finalizaban las clases, pero que los delincuentes buscaron otra forma de perjudicarlos y también robaron utensilios de limpieza.
Rafael Ulises, estudiante de la jornada nocturna, indicó que es incómodo salir a los pasillos durante los recesos, ya que la escuela está a oscuras. Agregó que los focos en las aulas son de intensidad baja, por lo que dificultan la visibilidad y el aprendizaje.
“Las autoridades deberían de preocuparse por este establecimiento, porque estamos abandonados. Los docentes hacen lo que pueden para enseñarnos, a pesar de las condiciones del centro educativo”, expresó Ulises.
Otro robo
El 4 de enero último, maestros de la jornada matutina de la Escuela Urbana Lorenzo Montúfar, de Jutiapa, denunciaron que delincuentes ingresaron al inmueble y robaron varios objetos valorados en unos Q35 mil.
Laura Peñate, directora del plantel educativo, informó que la escuela no cuenta con personal de guardia, a pesar de que lo han solicitado en varias ocasiones a las autoridades educativas.
“Todos los años al terminar el ciclo escolar el edificio se queda sin personal de vigilancia, situación que aprovechan los delincuentes para entrar a robar”, enfatizó.