Entre algunos de los problemas actuales destaca un Plan Nacional de Vacunación que comenzó en febrero pasado, y que a decir de los fiscalizadores en materia de salud ha priorizado a comunidades urbanas olvidando las provincias.
Otro de los problemas es el colapso en la red hospitalaria. Los hospitales están completamente llenos, sin medicamentos y aquellos que aún cuentan con insumos en sus bodegas no tienen el personal médico para que se haga cargo de aplicar los tratamientos.
Los diputados con la aprobación del decreto 11-2021 esperan que la crisis se mitigue en los próximos meses, ya que dan mayores facilidades de compras y contrataciones al MSPAS y al Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS).
Será la cartera de Salud quien tome la nueva ley como punta de lanza como parte de una respuesta frontal a la pandemia, ministerio que fue abandonado por Amelia Flores y que en su lugar tomó el puesto el doctor Francisco Coma, quien hasta hace unos días era el viceministro de hospitales.
Trabajo con ONU
El Seguro Social ha trabajado con la Oficina de Naciones de Unidas de Servicios para Proyectos (Unops) en el combate a la pandemia, lo que les ha llevado a almenos ahorrarse Q100 millones en la compra de medicamentos e insumos que están fuera de Guatemala.
La nueva ley le dice al MSPAS en su artículo 4 que “deberá de gestionar convenios con agencias del Sistema de Naciones Unidas para realizar sus adquisiciones”, donde Unops podría ser la alternativa más cercana por la experiencia ya tienen con el IGSS en el combate del covid-19.
Andrea Calvaruso oficial de Unops para Guatemala afirma que están dispuestos a trabajar en busca del bien común, por lo que están anuentes a cualquier tipo de acuerdo de trabajo en que pueda estar interesado el Ministerio de Salud.
“Somos una agencia del sistema de Naciones Unidas que es una representación de los países y estamos para apoyar a los países, claramente con mucho entusiasmo vamos a ver cómo podemos ayudar. Tenemos convenios de colaboración con el IGSS pero no con el MSPAS, con el Seguro Social hemos ayudado a tener abastecimiento de medicamentos para el tratamiento del covid, insumos de protección personal, insumos y ahora estamos construyendo unos hospitales modulares”, explicó Calvaruso.
Esta unión de fuerzas podría ayudar a que los hospitales nacionales cuenten con las medicinas suficientes, pero existe otra metodología que también podría ser útil según la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa) y es continuar con la aplicación del Módulo Sugerido de Compra.
Compra estratégica
Aunque el Pleno del Congreso no aprobó una enmienda que buscaba dar transparencia al gasto de los recursos públicos que serán utilizados en esta ley temporal, esto no significa que una de las herramientas que utiliza el MSPAS quedará fuera.
Al menos esa es la lectura de Juan Carlos Zapata, director ejecutivo de Fundesa, institución que en 2016 propuso al MSPAS una herramienta titulada Modulo Sugerido de Compra, un sistema computarizado que permite compras estratégicas en los hospitales.
Actualmente este método ya se aplica en 45 centros asistenciales, gradualmente se implementará en todos los hospitales tras un acuerdo gubernativo emitido en el 2019.
La enmienda rechazada buscaba que se emitiera un acceso público para que todos los ciudadanos tuvieran acceso a las compras para llenar las bodegas hospitalarias, aunque la mayoría de diputados le dijo no a ese insumo de transparencia.
Pero Zapata indica que la metodología se continuará usando, destacando que en los años que ya lleva esta herramienta le ha permitido al Estado de Guatemala ahorrar una cantidad considerable de dinero al ejecutar compras con más análisis.
“Ha sido transformador. Le diría que primero ha generado un ahorro al sistema de salud por casi Q350 millones en la mejora de la eficiencia de los inventarios, se ha reducido en 25% los días de cama por paciente, esto lo que hace es que genera mayor capacidad para que los hospitales puedan atender a más gente y ayuda a visualizar cuales son las unidades de los hospitales que están comprando a diferente precio, lo que ayuda a garantizar transparencia en el proceso”, señaló.
El sistema se encarga de responder que medicamentos se consumen con mayor velocidad y cuáles no, cuanto tiempo llevan ciertos fármacos en bodega y en base a esos datos, sugerir la cantidad de insumos a comprar.
Pero de la mano también debe de ir la contratación de más médicos y enfermas, a criterio de Marvin Flores de Acción Ciudadana, este insumo no servirá de nada si no se cuenta con los expertos que apliquen esas medicinas.
“Si tendría que ser útil pero va a depender mucho de las unidades ejecutoras. No es solo un tema de medicamentos, es un tema de insumos hospitalarios, es también un tema de contratación de recurso humano, personal que se pueda hacer cargo en primera línea; médicos y enfermeros por ejemplo, para comenzar a atender esta crisis. Los profesionales de la medicina han dicho que la crisis puede ser más grave de lo que está ahora”, argumentó.
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Tiene dudas
Aunque los Jefes de Bloque del Congreso afinaron la iniciativa de ley el pasado fin de semana, durante la sesión de Pleno donde fue discutida una lluvia de enmiendas complicó su discusión.
Algunas fueron rechazadas pero otras se aprobaron, sin contar con un respaldo técnico de su posible eficacia o inversión, porque algunas de esas enmiendas van a necesitar ejecución presupuestaria.
Eso según la perspectiva de la diputada Lucrecia Hernández Mack, integrante de Movimiento Semilla y exministra de Salud, quien teme que la ley venga a complicar las tareas a la cartera salubrista por toda esa lluvia de ideas a último minuto.
Incluso el Modulo Sugerido de Compras, a criterio de Mack, no es la mejor referencia cuando se habla del combate a una pandemia, ya que ese sistema genera compras en base a predicciones, pero con el covid-19 los escenarios cambian de manera abrupta.
“La herramienta le puede a uno sugerir cuando y cuanto comprar, si el medicamento es de alta rotación, mediana o baja, considerando esto no es la mejor herramienta para medicamentos que se está utilizando en una pandemia porque dependiente de la ‘ola’ la data varia, no es la mejor herramienta. Si ayuda a transparentar pero no para compras de emergencia”, indicó la diputada.
La congresista está clara que esta nueva ley no dará una solución de fondo, incluso la normativa hará poco o nada si no va de la mano con medidas de contención que tienen que salir desde el Organismo Ejecutivo que se encuentra estrenando a su tercer ministro de Salud.