Según el director, los argumentos de la junta fueron letras de más en las papelerías, que consideraron como no aceptables, por lo que el concurso fue declarado desierto. En el primer concurso la razón fue que hubo cambios en las bases de licitación, por lo que retiraron el proceso.
El Renap ya solicitó al presidente Alejandro Maldonado que en consejo de ministros apruebe que esa entidad pueda comprar por excepción, ya que a finales de febrero próximo vence en el contrato vigente de tarjetas e impresión del DPI.
De concluir el contrato y Renap no posea las tarjetas, existe el riesgo que dejen de emitir el Documento Personal. El proceso para fabricarlas tarda tres meses, razón por la cual el director explicó que es necesario buscar una solución.
“Estamos buscando mecanismo alternos para suministrarnos de tarjetas. Una opción es convenios con organizaciones internacionales como la Casa de la Moneda de España, apoyo de otros países como Ecuador que fabrica tarjetas, se puede hacer la negociación Estado a Estado”, detalló Gallardo.
El director afirmó que aunque compren en este momento el proceso ya estaría retrasado. El riesgo es que Renap se quede sin emitir DPI por un periodo indefinido de tiempo. “Si no se logra la licitación, un convenio o el acuerdo de consejo de ministros, eso puede pasar”, afirmó el director de Renap.
Las ofertas
En el Sistema de Compras y contrataciones del Estado aparece el registro de tres empresas que realizaron sus ofertas, se trata de: Datalogic Systems, Sociedad Anónima, quien ofertó por Q54 millones 350 mil. Además participó Industria de Papel, Sociedad Anónima, que ofreció el servicio por Q59 millones 750 mil y Productive Business Solutions (Guatemala), por Q39 millones 875 mil.
El proceso de Renap era para adquirir 2 millones 500 mil tarjetas para imprimir el DPI, material que serviría para emitir el documento los próximos tres años
