Cristhians Castillo, analista del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (Ipnusac), dice que históricamente los partidos políticos han cedido el espacio de la vicepresidencia al sector empresarial, por el valor estratégico que representa en la conducción de los gabinetes del Gobierno, especialmente el Económico.
“Este gabinete, quien lleva la política macroeconómica, ha estado en manos del sector empresarial, pues consideran al vicepresidente como un operador político. En los dos últimos gobiernos perdió un poco de vigencia porque Otto Pérez decidió que fuera Roxana Baldetti, y Jimmy Morales, obviamente, nadie esperaba que ganara la Presidencia”, sostiene Castillo.
El artículo 190 de la Constitución Política de la República establece que el vicepresidente debe ser electo en la misma planilla, junto con el presidente de la República, en idéntica forma y para igual período.
La Carta Magna agrega que el vicepresidente deberá reunir las mismas calidades que el presidente y que “gozará de iguales inmunidades y tiene en el orden jerárquico del Estado, el grado inmediato inferior al de dicho funcionario”.
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Desconocen su papel
El primer exvicepresidente de la nueva era democrática, Roberto Carpio Nicolle (1986-1991), asegura que el papel de un vicemandatario debe ser muy preponderante, pero que depende de la dinámica que la persona le quiera imponer a su trabajo. “Desde hace un tiempo vengo diciendo que desconocen el trabajo que deben cumplir”, indica.
Carpio Nicolle, quien ocupó este cargo en la presidencia de Vinicio Cerezo Arévalo, afirmó que durante esos años se encargó, aparte de coordinar los gabinetes, de organizar eventos a escala internacional, entre ellos algunos relacionados con la microempresa, y creo la Comisión de Ciencia y Tecnología.
Dirigir los gabinetes
La principal función del vicepresidente es la coordinación de los gabinetes, la cual es fundamental porque allí se les da seguimiento a las políticas del Ejecutivo, según Alfonso Fuentes Soria, exvicepresidente nombrado por el Congreso en 2015, luego de la caída del gobierno del Partido Patriota, por actos de corrupción.
Según Fuentes Soria, en este ámbito es donde se trabaja con los ministros, viceministros y secretarías del Estado, para analizar la ejecución del presupuesto.
También indicó que en términos políticos la persona que ocupa este puesto debe mantener mucha lealtad al presidente y lo debe ayudar a gobernar. “Es importante que trabajen como equipo, entendiendo que los dos son líderes, para beneficio del país”, dijo.
“No ha funcionado”
De acuerdo con el sociólogo y analista político Adrián Zapata, el papel fundamental que le otorga la Constitución al vicepresidente es coordinar los gabinetes, pero que “hasta el momento no se ha logrado articular las políticas del Ejecutivo con las comunidades donde se ejecutan”.
Zapata considera que uno de los grandes propósitos de la política de los ministerios y secretarías es superar la visión sectorial con que han trabajado —cada uno en su quehacer— y desarrollar una visión intersectorial, para evitar, por ejemplo, que en una comunidad la educación vaya por un lado y la salud por otro.
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De acuerdo con el analista, para lograr esta articulación el vicepresidente debe tener conocimiento de los grandes temas, para que así los gabinetes específicos coordinen las políticas sectoriales —ministerios—.
“Si no logra eso, la visión estratégica para gobernar sigue fallando, pues cada institución trabaja por su cuenta”, expresó.
Zapata agregó que ese es uno de los grandes retos de la Vicepresidencia, y no solo en Guatemala.
“Este cargo debe dejar de verse como una figura decorativa o que su única función es sustituir al presidente cuando no esté”, afirmó.
| Poco por hacer La Constitución americana en su artículo II señala que únicamente “en caso de que el Presidente sea separado de su puesto, de que muera, renuncie o sea incapacitado para dar cumplimiento a los poderes y deberes del referido cargo, este pasará al Vicepresidente...". De no ser así, el vicepresidente no tiene más función reconocida constitucionalmente que la de ser presidente del Senado, votando únicamente en caso de empate. Es más, como no suele ir con frecuencia a las sesiones parlamentarias, se nombra, entre los senadores elegidos, a un presidente pro tempore, que es el que realmente dirige los debates en la Cámara Alta. |
Las funciones que manda la Constitución
El artículo 191 de la Constitución define su trabajo
- Participar en las deliberaciones del Consejo de Ministros con voz y voto.
- Por designación del presidente de la República, representarlo con todas las preeminencias que al mismo correspondan, en actos oficiales y protocolarios o en otras funciones.
- Coadyuvar, con el presidente de la República, en la dirección de la política general del Gobierno.
- Participar, conjuntamente con el presidente de la República, en la formulación de la política exterior y las relaciones internacionales, así como desempeñar misiones diplomáticas o de otra naturaleza en el exterior.
- Presidir el Consejo de Ministros en ausencia del presidente de la República;
- Presidir los órganos de asesoría del Ejecutivo que establezcan las leyes.
- Coordinar la labor de los ministros de Estado;
- Ejercer las demás atribuciones que le señalen la Constitución y las leyes.
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