En el acto, Maldonado ofreció en el grado de Gran Cruz la Orden del Quetzal a los ministros de Defensa y Comunicaciones, carteras que tuvieron a su cargo el proyecto Querida Familia, el cual representó un desembolso para el Estado de unos Q20 millones.
Maldonado no es el primer presidente que reconoce el trabajo de sus ministros, funcionarios de Estado que el mismo presidente designa y encomienda tareas específicas a cambio de un sueldo, dietas, viáticos y gastos de representación.
Alfonso Portillo durante su presidencia también optó por reconocer el trabajo de sus cercanos, en ese entonces entregó la misma Orden del Quetzal a su vicepresidente Juan Francisco Reyes López, por el trabajo realizado durante la visita de Juan Pablo II.
Otto Pérez Molina tampoco se resistió a condecorar a sus funcionarios por el trabajo realizado. En febrero de 2014 decidió entregar al entonces ministro de Comunicaciones Alejandro Sinibaldi y al de Gobernación Mauricio López Bonilla, con la Orden de la Cruz de las Fuerzas de Tierra y la condecoración Monja Blanca de Primera Clase. Las preseas según el acuerdo específico, emitido para tal ocasión, era “reconocer el agradecimiento de la nación, por aquellos actos y servicios de heroísmo, abnegación y espíritu de sacrificio”.
Intercambian condecoraciones
Durante el acto, el Ejército de Guatemala aprovechó para otorgar a Maldonado el grado de Ingeniero Honorario, una orden que ofrece el Cuerpo de Ingenieros del Ejército, que tuvo a su cargo parte de la urbanización del proyecto Querida Familia. Maldonado recibió como símbolo del cargo ofrecido un sombrero negro que portó por breves momentos durante el acto.
Unos seis meses antes, el 27 de julio de 2015, el entonces presidente Otto Pérez Molina también recibió el mismo reconocimiento del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, durante el 41 aniversario de la entidad.
En ese entonces, el Ejército recibió el agradecimiento de Pérez Molina por la reconstrucción de casas dañadas por el terremoto de 2012, en San Marcos.
Polémica presea
La Orden del Quetzal es la distinción honorífica máxima que el Gobierno de Guatemala puede otorgar a mandatarios, personas y organizaciones nacionales y extranjeras, cuya labor humanitaria, cultural o política haya sido relevante para el país. Fue creada por el presidente Jorge Ubico en 1936.
En 1973 se aprobaron los grados: Gran Collar, Gran Cruz, Gran Oficial, Comendador, Oficial y Caballero.
Académicos han coincidido en otras ocasiones que esta distinción honorífica se emplea para agradar en materia política, no necesariamente significa que la sociedad esté de acuerdo con el Gobierno en cuanto a las personas a quienes se les entrega.
La Orden ha sido recibida desde el científico Luis Von Ahn, hasta Fidel Castro; pasando por Benito Mussolini, Augusto Pinochet y Jorge Rafael Videla. Ricardo Arjona también recibió de manos de Pérez Molina la presea, sin embargo en 2015 la devolvió, luego de revelarse los escándalos de corrupción de su gobierno.