En un mensaje a la nación, Giammattei dijo que la administración tomó la decisión de dispersar a esos jefes de la pandilla, agrupación conocida como la Rueda del Barrio, porque hay “una maldita relación entre las cárceles y las calles”.
Señaló que la Policía Nacional Civil tiene instrucción de negociar la deposición de la toma de rehenes y el resguardo de la integridad de los agraviado, pero no de marcha atrás al operativo para reubicar a los jefes pandilleros.
“Nuestra obligación es dar seguridad y lo vamos a hacer”, apuntó.
Anunció que la administración impugnó el fallo de un juez que denegó el traslado de un reo condenado a 1 mil 670 años de cárcel que actualmente está en el Preventivo de la zona 18. “Esa resolución del juez protege a uno de los más grandes criminales de Guatemala en contra de la seguridad de los ciudadanos”.
Por último el presidente llamó a la población a denunciar las operaciones de los grupos pandilleros al teléfono 110.