También se incluye en la denuncia a la empresa proveedora del producto: Industrias de Papel, S.A.
La irregularidad denunciada según AC, se detectó en seis direcciones departamentales: Totonicapán, Quetzaltenango, Retalhuleu, San Marcos, Huehuetenango y Guatemala Norte.
Según la investigación y las pruebas presentadas ante el MP, hubo directrices desde el despacho ministerial donde se instruye al personal sobre la forma de adquirir cierta clase de lapiceros.
Se creó un instructivo para la adquisición de bolsas de útiles escolares, la que no fue aprobada a través de Acuerdo Gubernativo y solo se socializó a través de correos electrónicos, con las personas encargadas de las adquisiciones.
Los lapiceros tienen un valor en el mercado de Q0.80 centavos, y fueron comprados a un precio aproximado de Q1.40.
Especificaciones
El Ministerio de Educación (Mineduc), fijó ciertas especificaciones para la adquisición de los lapiceros.
Se solicitó que fueran bolígrafos punto fino color azul, barril redondo con sistema antiasfixia y tapón de seguridad posterior soldado.
La compra finalmente fue de bolígrafos punto mediano marca Cristal, el que no cumplía con los requerimientos.
Llevan auditoría
El actual ministro de Educación Rubén Alfonso Ramírez, reconoció que existe una investigación interna por la adquisición de lapiceros, sin embargo hasta ahora solo tenía conocimiento de irregularidades en la dirección departamental Guatemala Norte.
El viceministro García reconoció a través de un comunicado que se adquirieron lapiceros con características distintas a las requeridas, y explicó que “algunos auditores de unas Direcciones Departamentales consideraron tiempo después que las características del lapicero no eran las mismas que se establecía en el contrato abierto, especialmente la punta”.
Según la declaración envíada por escrito a Prensa Libre, “la imputación que se hace carece de fundamento” y el viceministro García pide “seriedad en los procesos de revisión, investigación y auditoría”.
