La lista Engel es un catálogo de personajes señalados de corrupción o de socavar la democracia e institucionalidad de un país, recién este miércoles el Departamento de Estado publicó una actualización en la que añade a 16 guatemaltecos, entre funcionarios, jueces, fiscales y empresarios.
Ventrell reconoció que algunos de los incluidos puede que resten importancia a su inclusión, pero recordó que EE. UU. tiene “muchísimas más herramientas” que podría emplear en caso los señalados no cambien su comportamiento.
Estas, dijo, incluyen “desde la revocación permanente de una visa a una persona y sus familiares, hasta acciones de tesorería que sí son sanciones financieras”.
Mensaje claro
Es la primera vez que EE. UU. incluye a empresarios guatemaltecos en la lista, en ese sentido Ventrell subrayó que su gobierno mantiene “muchas preocupaciones en el tema de corrupción” tanto de funcionarios como del sector privado.
Para estos actores señalados, el “mensaje es claro”, puntualizó el funcionario estadounidense, “que no participen —en actos de corrupción— porque no pueden ser socios de EE. UU. en el corto, mediano y largo plazo”.
Ventrell dijo que EE. UU. sigue preocupado por las amenazas para el bienestar democrático y que la actualización de la lista Engel es “seria” y se basa en “mucha información que recibimos a través de nuestras misiones en el exterior y toda la información que tiene EE. UU. clasificada y no clasificada”.
Añadió que aparte de la lista hay “muchísimos otros casos” que no se han hecho públicos y en los cuales también se les ha retirado la visa.
“Entendemos que hay quienes dicen que esta lista no los impacta o que no es suficiente para parar sus acciones, pero tenemos un compromiso para ayudar a Centroamérica, pero no vamos a poder mejorar las condiciones de la gente hasta que haya un cambio de comportamiento”, argumentó.
En la conferencia, Ventrell fue cuestionado de cómo EE. UU. piensa implementar sus estrategias en materia de migración cuando hay actores como el presidente Alejandro Giammattei que cuestiona a organismos internacionales y al propio Gobierno norteamericano.
El funcionario respondió que, aún esperan trabajar en temas de interés mutuo “a pesar de que no hemos visto las acciones que queremos en términos de mejorar la gobernanza e instituciones”.
Dijo que EE. UU. está interesado en promover las inversiones en Centroamérica y hacer crecer las economías de los países, y en ese sentido, “no queremos hacer daño a los pueblos con ninguna sanción”, ya que acciones como la actualización de la lista Engel intentan fortalecer las instituciones para mejorar el ambiente y “hacer presión desde EE. UU. y otras multinacionales” hacia el istmo.
Mensajes
Por su parte, el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, indicó que, con la publicación de la lista Engel de quienes socavan la democracia o cometen actos de corrupción, “apoyamos a quienes construyen un futuro mejor”.
The people of Central America deserve the opportunity to create a more democratic, prosperous, and safe region. Today, with the release of the 2022 list of those who undermine democracy or engage in corruption, we support those building a brighter future. https://t.co/SwPQTATQnn
— Secretary Antony Blinken (@SecBlinken) July 20, 2022
“Los pueblos de Centroamérica merecen la oportunidad de crear una región más democrática, próspera y segura”, enfatizó Blinken a través de Twitter.
Desde que Joe Biden llegó a la Casa Blanca, EE. UU. puso en marcha una estrategia para atacar las causas estructurales de la migración, cuyo eje central es la lucha contra la corrupción, convencidos en que esta práctica resta posibilidades de desarrollo a los centroamericanos y los impulsa a migrar.
De esa cuenta, diversos funcionarios han emitido pronunciamientos donde han mostrado su preocupación, por ejemplo, por la forma cómo se eligió a la actual Corte de Constitucionalidad o por la destitución del exjefe de la Fiscalía Especial contra la Corrupción, Juan Francisco Sandoval.
En marzo pasado, el embajador William Popp manifestó preocupación por la salida de la jueza Érika Aifán al mismo tiempo de indicar que su país espera un fortalecimiento del estado de Derecho.
Ese mismo mes, a través de un comunicado, el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, expresó que EE. UU. está “profundamente preocupado por los continuos y desvergonzados ataques de la fiscal general de Guatemala, Consuelo Porras, contra el sistema de justicia de Guatemala”.
Un mes antes, también había emitido un pronunciamiento similar, al señalar un “maltrato inaceptable y el abuso persistente” a fiscales y exfiscales por parte del Ministerio Público.