Con esa nominación, Bradley tendría que suceder a William Popp como representante de Washington en Guatemala.
Sin embargo, la nominación de Biden debe ser aprobada por el Senado de EE. UU., donde el partido Demócrata cuenta con mayoría de escaños.
La nominación de Bradley por parte del presidente Biden se dio a conocer luego de que se anunciara que el actual embajador de EE. UU. en Guatemala, William Popp, fue nominado como candidato a ser el embajador extraordinario y plenipotenciario en la República de Uganda.
Trayectoria de Bradley
El comunicado de la Casa Blanca detalló la trayectoria de Bradley, un miembro de carrera del Servicio Exterior Superior de EE. UU. con el rango de ministro consejero.
El documento señala que Bradley “actualmente se desempeña como subsecretario de Estado Adjunto en la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Cumplimiento de la Ley (INL, en inglés)”.
Añade que anteriormente “Bradley se desempeñó como director de INL en la Ciudad de México y cónsul general en Matamoros, México”.
Detalla que además “se desempeñó como director de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y Asuntos de Europa Occidental en el Consejo de Seguridad Nacional”.
El diplomático fue “consejero político en la embajada de los EE. UU. en Londres, asistente especial para asuntos del Cercano Oriente y Asia Meridional del Subsecretario de Asuntos Políticos, así como en el Departamento de Asuntos Políticos de los EE. UU.”
Washington añade que Bradley tuvo “misiones en Amman, USNATO y el Centro de Operaciones del Departamento de Estado”.
“Bradley también se desempeñó como asesor político de la provincia de Dhi Qar en Nasiriyah, Irak, y obtuvo la Medalla del Servicio Nacional a Estados Unidos para Asuntos Internacionales por su trabajo en la organización de elecciones democráticas locales”, refiere la nota.
“Nativo de California, Bradley recibió su B.S. de la Escuela de Servicio Exterior Edmund A. Walsh de la Universidad de Georgetown, y su maestría de la Escuela de Asuntos Públicos e Internacionales Woodrow Wilson de la Universidad de Princeton. Habla árabe, francés y español”, concluye el documento.