El secretario general, Luis Almagro, destacó que todos los esfuerzos de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (Feci) a cargo de Rafael Curruchiche, están centrados en la investigación del partido y del proceso electoral, sin embargo señala que no se ha visto la misma voluntad en el combate al crimen organizado y la corrupción.
“Resulta incomprensible porque no hemos visto la misma capacidad de acción contra el crimen organizado, no hemos visto desfilar a la corrupción hacia los tribunales”, criticó el secretario.
Reiteró su rechazo y preocupación hacia los intentos de empañar el proceso electoral, del cual la OEA fue también observadora.
“No es admisible, no es aceptable de ninguna manera”, sostuvo Almagro.
Detalló a los países miembros que las protestas en el país cumplen nueve días como expresión de desacuerdo ante los allanamientos en el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y las pesquisas que ponen en duda el proceso y los resultados electorales.
Además, expresó que la situación en Guatemala es “vergonzosa” para la región y que se ataca al proceso electoral, lo cual no tiene precedentes en las ocasiones en que la OEA ha observado las elecciones.
“Lo legal no es siempre lo legítimo, especialmente cuando está en juego la estabilidad del país”, citó el secretario ante el Consejo Permanente.
De la misma manera, dio a conocer que se reunió con los representantes de los 48 Cantones quienes aseguran que manifiestan y piden la renuncia de la Fiscal General, Consuelo Porras, de Curruchiche y del juez séptimo, Freddy Orellana, lo hacen con la cara destapada.
Por tal razón, el secretario reitera que no es complicado reconocer a quienes actúan de manera violenta en las protestas ya que son personas que actúan desde el anonimato, con la cara tapada.
Señala golpe de estado
El presidente electo, Bernardo Arévalo, compareció también en la sesión extraordinaria y pidió que en caso lo consideren los países miembros se emita una resolución clara y contundente para que se cese la persecución penal de los magistrados del TSE y de todos los actores involucrados en el proceso electoral.
“Son precisamente los abusos y atropellos contra las autoridades electorales y al partido ganador, el mío, lo que entre otros motivos han dado lugar a las protestas cívicas y las movilizaciones que han paralizado el país”, reiteró Arévalo.
Añadió que existe una similitud con otros países donde se da un golpe de estado utilizando la propia interpretación de la ley, llamado Lawfair.
En cuanto a la misión de mediación urgió que debe de dialogar con el gobierno del presidente Alejandro Giammattei así como con los líderes de los 48 Cantones y autoridades ancestrales, más que con algún representante del gobierno electo.
“Cualquier intento por involucrar al gobierno electo no tiene ningún sentido.”, aseguró.
Asimismo, criticó que el gobierno haya invitado a la OEA para que medie en la crisis ya que en reiteradas ocasiones han apelado a la soberanía del país en asuntos internos cuando órganos internacionales se pronuncian al respecto.
Canciller señala protestas
El canciller Mario Búcaro estuvo presente en la sesión y criminalizó las protestas aduciendo que violenta las garantías constitucionales por los bloqueos de rutas y actos de vandalismo de las últimas horas.
“El derecho a la manifestación que se ha presentado no es absoluto y aunque se ha respetado tiene sus propios límites para garantizar que las demás personas tengan el ejercicio de sus derechos constitucionales”, argumentó el canciller.
Agradeció que la OEA haya aceptado mediar en la situación y exhortó a los sectores a participar en los acercamientos respectivos.
Preocupación en la región
Nuevamente, fueron 14 los países que se pronunciaron y reiteraron su preocupación con la situación en Guatemala que, como aseguran varios representantes, concierne a la región proteger la democracia de cada país.
Gustavo Adrianzén, representante de Perú, refirió que como órgano no es funcional que más países se aparten, sino que como región estén unidos y que la situación de Guatemala no ocurra en otros países.
“Nuestra autonomía, nuestra independencia estatal, sin duda, debe ser suficiente, pero no debe ser tampoco una patente a la que tengamos que recurrir para excluirnos de nuestras obligaciones internacionales”, puntualizó.
A criterio del embajador uruguayo, Washington Abdala, confió en que como OEA están ayudando a la democracia de Guatemala estando conscientes de las limitaciones diplomáticas.
“Preocupa que le preocupe al presidente electo algunas instancias que son resortes internos de Guatemala”, declaró y resaltó la presencia de Búcaro reconociendo que es un tema de importancia el que se aborda.
En esa misma línea, Frank Mora de Estados Unidos reconoció que las acciones por parte del MP están obstaculizando el proceso de transición y que el desgaste del Estado se ve evidenciado en las intenciones por socavar los resultados electorales.
“Este comportamiento antidemocrático atestiguado en Guatemala va en contra de la voluntad de la ciudadanía y minimiza el compromiso del país con la Carta Democrática Interamericana”, especificó.
Además, Brasil, Canadá, Colombia, Costa Rica, Bolivia, República Dominicana, Panamá, Chile, Argentina, Honduras y México mostraron su preocupación e instaron a Almagro a continuar como acompañante de la transición de gobierno y como mediador.
