“Las prioridades del país en materia de política exterior son el tema migratorio, la solución del diferendo territorial, insular y marítimo con Belice, la integración centroamericana —unión aduanera—, más presencia de Guatemala en el mundo y el fortalecimiento institucional”, expuso el ministro de Relaciones Exteriores en la visión general.
En cuanto a la relación bilateral con EE. UU., el jefe diplomático precisó que en primer lugar está todo lo migratorio.
Tema migratorio, que incluye insistir en pedir el Estatus de Protección Temporal, seguimiento al plan de la Alianza, la reforma migratoria y la ampliación consular.
Cooperación en materia de seguridad. Estados Unidos ha brindado apoyo financiero y técnico a las fuerzas de tarea que trabajan en las fronteras occidental y oriental.
La promoción del comercio y las inversiones. Participar en distintos eventos empresariales y reuniones que incluyan a integrantes del sector privado guatemalteco y de EE. UU.
Tener mayor y mejor acercamiento con los distintos actores radicados en Washington, como la Casa Blanca, el Congreso, sociedad civil y tanques de pensamiento.
En ese paquete entra insistir en el estatus de Protección temporal (TPS, en inglés), el seguimiento al plan de la Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte, la reforma migratoria y la ampliación consular y de los servicios consulares.
Inversión y cercanía
La potencia norteamericana ha cooperado con las fuerzas de tarea fronterizas en Guatemala, por lo que el apoyo en materia de seguridad es otro aspecto por impulsar, así como la promoción del comercio y las inversiones.
La cuarta prioridad es “mayor y mejor” acercamiento a los distintos actores en Washington, como la Casa Blanca, el Congreso y la sociedad civil.
“La embajadora Ruiz de Vielman tendrá que impulsar de manera renovada las prioridades de política exterior del país”, añadió Morales.
Ruiz de Vielman asumió el 27 de junio último.
Poca esperanza
Félix Fuentes, del Movimiento de Migrantes Guatemaltecos en los Estados Unidos, afirmó que ven con poca esperanza los temas migratorios.
“La reforma migratoria se ve muy lejana porque vienen las elecciones. Los republicanos se sabe que nada harían, y Hillary Clinton y los demócratas hacen promesas, pero no se hacen los esfuerzos verdaderos”, aseguró.
Fuentes consideró que lo más positivo que ven de la estrategia guatemalteca es incrementar la presencia de consulados. “Esperamos que también haya más personal y brinde mejor atención a los connacionales, porque a veces los ven como personas de segunda clase, cuando son ciudadanos que valen”, agregó.
Además se quejó del Consejo Nacional de Atención al Migrante de Guatemala (Conamigua), al afirmar que las instituciones que lo integran no toman en cuenta el liderazgo guatemalteco en EE. UU., sino que todas las decisiones “las toman en la capital”.
Geidy de Mata, profesora de la Escuela de Ciencia Política de la Universidad de San Carlos, opina que la política exterior del país debe estar fundamentada en los problemas nacionales, y que uno de ellos es la crisis institucional.
“Debemos reconocer que los países desarrollados tienen un avance en la administración de justicia y se necesita transferencia de experiencias”, afirmó.
Asimismo, indicó que, geopolíticamente, a EE. UU. le interesa mucho el combate del narcotráfico y crimen organizado, así como el control de su territorio, lo que los motiva a cooperar en esa área con Guatemala.
Urge que den el TPS
Félix Fuentes, del Movimiento de Migrantes Guatemaltecos en EE. UU., manifestó que siempre será importante obtener el TPS, aunque el optimismo entre la comunidad guatemalteca en aquel país ha bajado, debido a las elecciones.
“Desde el huracán Mitch, en 1998, le han dado el TPS a El Salvador y Honduras, pero no a Guatemala”, expresó.
Analista
Le interesa seguridad
De las cuatro prioridades que Guatemala plantea, la que más le interesa a EE. UU. es la seguridad, afirmó Geidy de Mata, profesora de la Escuela de Ciencia Política de la Universidad de San Carlos. “Su prioridad es el narcotráfico y el crimen organizado, porque geopolíticamente es un gran peligro para los Estados Unidos”, señaló De Mata.