Guatemala

Guatemala y los derechos infantiles que el Estado no respeta

Organizaciones denuncian que en Guatemala los avances en materia infantil son "insuficientes" y que hay "graves retrocesos" en el cumplimiento de los derechos de la niñez.

Casi la mitad de la población del país no tiene mayoría de edad y tienen limitado acceso a servicios públicos. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Casi la mitad de la población del país no tiene mayoría de edad y tienen limitado acceso a servicios públicos. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Con motivo de la evaluación quinquenal que el Estado de Guatemala presenta ante el Comité de Derechos del Niño en Ginebra, Suiza, las organizaciones Ciprodeni, Child Fund, Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales, la Red Niña Niño y Plan International reconocen “enormes desafíos” relacionados con la promoción, protección y garantía de los derechos de los menores.


Además, urgen al Gobierno a conformar un equipo de trabajo entre la Secretaría de Planificación y el Ministerio de Finanzas Públicas para crear un “sistema público” de monitoreo, seguimiento y evaluación de las políticas públicas y su financiación destinadas a este segmento poblacional.

La inversión en los menores es la más baja de Centroamérica después de Nicaragua, apenas un dólar per cápita al día, una cifra que contrasta con países como Costa Rica y Panamá, que invierten en promedio cinco dólares diarios.

En la evaluación de 2010, el Comité recomendó al Estado de Guatemala aprobar una reforma tributaria “amplia y progresiva” para aumentar la base impositiva y cubrir los sectores sociales y la infancia.


A pesar de ello, las organizaciones denuncian que la carga tributaria no ha superado el 11 % (2013) e incluso ha disminuido, llegando a 10.2 % en 2017.

Este es un “resultado muy desalentador” para una sociedad en donde el 47.9 % de su población son menores que requieren “bienes y servicios públicos diseñados y ejecutados para promover la igualdad, el bienestar, la democracia y el desarrollo”.

Además del insuficiente gasto público alerta de la baja ejecución presupuestaria, llegando “a niveles mínimos en 2013, con el 76.1 %, y en 2015 con el 80.3 %”.

“Esta incapacidad de ejecutar los presupuestos ha significado, entre 2009 y 2016 una pérdida de por lo menos Q10 mil 201 millones (más de US$ 1 mil 390 millones) que no se invirtieron en garantizar la seguridad alimentaria y nutricional de los menores de cinco años”, agrega el comunicado.

Unos datos que explican porque la desnutrición crónica, que afecta a la mitad de los niños menores de 5 años, apenas a disminuido un 9 % desde 1996, dejando 111 pequeños muertos en el último año.

La situación de pobreza en los niños se acentúa en los indígenas, donde según los últimos datos del Icefi y Unicef el 82.8 % de los pequeños viven en condiciones de pobreza, en contraste con el 55.7 % de la niñez mestiza.