El mandatario sostuvo que el informe no es concluyente y debe tener implicaciones penales para los responsables de la muerte del menor guatemalteco.
Inconsistencias en el informe de la Organización de Estados Americanos (OEA) fueron señaladas este lunes por el Estado de Guatemala, en torno al incidente armado que dejó un niño muerto en la zona de adyacencia de Belice.
Según expertos forenses locales, la “necropsia no coincide con informe forense de Belice y son 9 heridas mortales al menor”.
Las zanjan más dudas con el testimonio de Ana Guzmán, del Ministerio Público que asegura que existen carencias en la investigación encargada por la OEA, entre estas destaca la falta de soporte científico y recolección de evidencias.
Como ya lo había manifestado días atrás el canciller, Carlos Morales, el informe de la OEA no es concluyente ni exhaustivo y se basa en testimonios y notas diplomáticas, por lo que no se puede aceptar por el Estado de Guatemala.
El canciller dijo que se solicitará a la OEA la remoción de Magdalena Talamás como representante de esa organización para asuntos de Belice y Guatemala y también la destitución de Serbio Benítez, jefe de la referida oficina.
Luego de trascender el informe de la OEA, Belice ha solicitado una disculpa de Guatemala por el incidente que dejó un connacional muerto, ante esto la respuesta oficial de la cancillería ha sido: “Que quede claro que Guatemala no pedirá ninguna disculpa a Belice. Se está negando justicia”.
Tensas relaciones
El embajador de Guatemala en Belice, Estuardo Roldán, reconoció que las relaciones entre los dos países están “afectadas” desde el incidente de abril pasado en el que murió un menor guatemalteco, y que por ello la tensión en el área también aumentó.
“Es una piedra en el zapato”, dijo el diplomático en Guatemala, que fue llamado a consulta por el presidente, Jimmy Morales, en abril, luego de los incidentes.
El documento, hecho público el 26 de agosto, señala que el menor Julio René Alvarado, quien se había adentrado en la zona de adyacencia administrada por Belice, falleció a causa de los disparos realizados por los guardabosques beliceños que forman parte de las patrullas de vigilancia.
El joven, de 14 años según su partida de nacimiento, se adentró 562 metros al este de la línea de adyacencia y ahí se produjo un intercambio de disparos según las evidencias encontradas en un árbol, que indican que los proyectiles provenían del lado donde se encontraba la familia guatemalteca.