“Es un atentado contra la salud y contra la vida de las personas que adquisiciones de esa naturaleza se esté realizando”, señaló Castillo sobre la compra de 30 mil test de covid-17 que el Ministerio de Salud compró a la empresa Kron Científica e Industrial SA, de lo cual el fabricante, Atila Biosystems, asegura que no le vendió y que cree que las pruebas fueron falsificadas en Guatemala.
Fue justamente en Huehuetenango donde se activó la primera alerta sobe las anomalías en las pruebas, desde lo cual empezó la averiguación que terminó con una denuncia en la Fiscalía contra la Corrupción.
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Castillo agregó que este caso “es un crimen de Estado” y que la justicia pueda dar información verídica que esclarezca los hechos.
Asimismo, y sin mencionar al presidente Alejandro Giammattei, con quien mantiene un distanciamiento, expuso que los funcionarios que estén implicados deben ser separados de los cargos, al tiempo que, en aras de la transparencia, las compras del ministerio deben tener un proceso de saneamiento.
Hasta ahora Salud no ha destituido personas, pero sí denunció a Ronaldo Estrada Rivera, exgerente financiero de Salud y actual viceministro del Deporte y la Recreación; Claudia Fuentes Estrada, jefa del Departamento Administrativo de Salud; Byron Echeverría Ochoa, supervisor de bodega y suministros, así como a Juan Pablo Arocha Urbina y Luis Alfredo Arocha Bermúdez, gerentes de Kron Científica e Industrial, SA.
