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La lectura del tercer informe comenzó con un extracto del poema “Carta a mi hijo”, de Enrique Rambal, para hacer referencia a que los guatemaltecos no deben confiar en “políticas de espejitos” y evitar la lucha entre hermanos.
Antes de informar sobre las acciones que el Ejecutivo efectuó durante el 2018, Morales afirmó que “el tablero mundial cambia las reglas del juego”, por lo que en el país “tenemos dos rutas: Una es Guatemala y nuestras leyes y nuestras políticas, y la nueva propuesta del orden mundial que parece ser un nuevo colonianismo”.
Según el mandatario, la segunda opción “consiste e imponernos formas de pensar, de actuar, de convivir por encima de nuestras leyes y de nuestra Constitución. Por otro lado, nuestra Constitución protege la vida, la persona, la familia, y mientras yo tenga fuerzas para defender mi patria, mi fe y mi familia, lo haré y se los juro”.
Morales hizo un llamado asimismo “a los hijos de esta patria para defender la soberanía”.
Sus logros
Después, el mandatario comenzó a detallar las acciones durante el penúltimo año de gestión, entre ellas, haber adoptado dos normas anticorrupción, que incluye una antisoborno. Además, resaltó la construcción de un presupuesto abierto y aseguró que el suyo fue el primer gobierno guatemalteco que formuló un presupuesto de forma aplicada y con participación de la ciudadanía.
Para lograr la reducción de la desnutrición crónica, según Morales, se benefició a 1.4 millones de niños con servicios de vacunación, desparasitación y el impulso a la lactancia materna. Además, la vacuna contra el papiloma humano protege a las niñas contra el cáncer de cérvix. Al referirse al tema, el presidente mencionó “a quienes hablan de desnutrición” y volteó a ver al palco diplomático.
En educación, el mandatario recordó el beneficio de conformar Organizaciones de Padres de Familia, el incremento al financiamiento de la refacción escolar y la inversión de más de Q200 millones en programas de apoyo, equipo y mobiliario y reparación y remozamiento de escuelas.
La inversión en la infraestructura vial, con la reparación de dos mil 400 kilómetros de carreteras asfaltadas y cuatro mil kilómetros de terracería, fue otro de los avances durante el 2018.
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Morales agregó que para esto fue necesario apoyarse con el Ejército, pues debido a denuncias penales “no podía tocar las carreteras”.
La instalación de biobardas en el lago de Amatitlán y en el río Motagua fue otro logro anunciado por Morales, quien también destacó la respuesta que brindaron las instituciones durante y después de la tragedia provocada por la erupción del Volcán de Fuego.
La reducción de las tasas de homicidios y de delitos contra el patrimonio, que fue promesa electoral, ya se cumplió, afirmó el gobernante, quien también destacó la profesionalización de la Policía Nacional Civil y agradeció el apoyo del Ejército en las tareas de seguridad ciudadana.
Morales además dijo que su administración ha incautado más droga que durante las dos administraciones de gobierno anteriores y dijo que el Aeropuerto Internacional La Aurora es el tercero con la mejor calificación obtenida a nivel latinoamericano. “Por esa razón, cuidémoslo, cuidemos los nuestro, no rompamos leyes, el que rompa las leyes tendrá que vérselas con la justicia”, resaltó.
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Entre aplausos
El discurso de Morales tardó más de 50 minutos y por momento era interrumpido por los aplausos de los diputados oficialistas y ministros, sobre todo al referirse al traslado de la embajada de Guatemala a Israel, una acción que según el mandatario, fortaleció los lazos de amistad entre ambos países.
Morales no hizo alusión a la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala, pero sí mencionó que la soberanía es del pueblo, “quien a través de un voto, cada cuatro años, delega esa autoridad y soberanía en las autoridades electas, el presidente y vicepresidente, 158 diputados y alcaldes”.
Para finalizar su discurso, el presidente reiteró la petición de que este año se efectúen elecciones libres y sin intervención extranjera y pidió que los guatemaltecos asistan a votar.
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