La entrevista, concedida el 29 de octubre en su residencia para Prensa Libre y tres medios nacionales más, se da un día después de que Estados Unidos, a través de una comunicación emitida por el Secretario de Estado, Mike Pompeo, sancionó al primer secretario del Congreso de Guatemala, Felipe Alejos Lorenzana, y a la exdiputada Delia Bac, por su implicación en “corrupción significativa”.
El diplomático afirmó que su meta principal es profundizar la buena relación entre Guatemala y Estados Unidos. Reiteró que los intereses en común son muchos y que el foco de su trabajo en el país serán la prosperidad, el comercio, la inversión, ayudar a que la actividad económica en Guatemala crezca, apoyar en la seguridad, en el combate del narcotráfico y el tráfico de personas, además de ayudar a que en el país impere el estado de Derecho, sin impunidad, y a que continúe la lucha contra la corrupción.
Hay información creíble de que él —Felipe Alejos— y Delia Bac están involucrados en corrupción. William W. Popp
Cuando habla de seguir apoyando la lucha contra la corrupción e impunidad ¿a qué se refiere?
Hay muchas cosas que podemos y vamos a hacer juntos, en cooperación con Guatemala, en la lucha contra la corrupción. En primer lugar, hay pasos como el que se dio ayer con las dos designaciones. Ese es un mecanismo, el 7031(c), amparado en las leyes de Estados Unidos, que tenemos para avanzar en la lucha contra la corrupción y evitar que gente que se beneficia de la corrupción use esos beneficios en Estados Unidos o en otros lugares.
Es una manera de apoyar y la vamos a seguir usando. También hay asistencia y experiencia que podemos aportar a las instituciones guatemaltecas. Estamos trabajando con el Ministerio Público (MP), y en particular con la Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci), con capacitación, información, ayuda técnica.
Hay otros mecanismos, como acciones individuales, como la aplicación de la Ley Global Magnitsky, que es usada en varios países del mundo para sancionar a individuos que están involucrados en corrupción. Hay varias maneras en las que podemos ayudar a Guatemala.
¿Qué mensaje quiere enviarles Estados Unidos a la ciudadanía guatemalteca y a los políticos y funcionarios guatemaltecos?
El mensaje es que estamos del lado de Guatemala en contra de la corrupción, y gente que está involucrada en corrupción no va a tener oportunidad de usar sus beneficios en Estados Unidos. Vamos a seguir apoyando los esfuerzos en Guatemala.
En los casos de Alejos y Bac, ¿qué vieron en Washington para tomar la decisión de sancionarlos?
El proceso de designaciones está muy bien definido en la ley de Estados Unidos Cuando tenemos información creíble sobre individuos, nosotros avanzamos con los casos y las designaciones. Lo que vimos ayer es un proceso que lleva su tiempo para obtener información creíble, y una vez que tuvimos esa información creíble para hacer la designación, el secretario de Estado hizo la designación públicamente, como la ley indica que podemos hacerlo. Cuando tengamos la información avanzamos con los casos.
Nosotros vamos a seguir en esa línea de apoyar a todas las instituciones que trabajan en luchar contra la corrupción.
Felipe Alejos ha sido amparado cuatro veces por la Corte Suprema de Justicia en el caso Traficantes de Influencias. ¿Les causa preocupación eso?
Para nosotros es una cuestión de las leyes norteamericanas. Obviamente hay procesos aquí en Guatemala, y eso es para las leyes guatemaltecas, como lo traten. En el caso de la ley norteamericana, una vez que exista información creíble que tiene que ver con actos corruptos, entonces es posible designar a esa persona para que no pueda entrar a Estados Unidos y no pueda usar esos bienes derivados de corrupción en la economía norteamericana. Bajo nuestra ley podemos cancelar una visa o podemos designarla no elegible para obtener visa en el futuro, y ese es este caso. Fue designado para no recibir visa en el futuro.
En la sanción se afirma que Alejos perjudicó gravemente la actividad económica internacional de las empresas estadounidenses. ¿Habrá persecución penal en Estados Unidos?
No puedo hablar de casos legales, fuera de la designación. En el caso de ayer —miércoles—, hay información creíble de que él y Delia Bac están involucrados en corrupción. Los casos penales son separados al asunto de viajar a Estados Unidos.
Ha mencionado el apoyo a la Feci, pero en los últimos años quien manifiesta respaldar a esa entidad es objeto de críticas y ataques. ¿Cuál es la postura de la embajada de Estados Unidos en materia de apoyo?
Nuestro apoyo para la Feci y el MP está muy claro. Estuve la semana pasada con la fiscal general y visité la Feci también. Hemos tenido expresiones de apoyo desde Washington, visitas a esa fiscalía y al MP. Nosotros vamos a seguir en esa línea de apoyar a todas las instituciones que trabajan en luchar contra la corrupción.
¿Hay algún cambio en la política del Departamento de Estado? Pues luego de la salida de la Cicig no había pronunciamientos tan fuertes.
Nuestro compromiso ha sido y sigue fuerte. Es un apoyo a Guatemala. Hay una parte fundamental para conseguir la prosperidad y es combatir la impunidad y la corrupción, y aumentar la transparencia. Vamos a seguir apoyando en ese tema.
¿Qué es lo que más le preocupa a Estados Unidos sobre Guatemala?
Debemos ser positivos. En materia económica ha sido un momento difícil con la pandemia, pero va en marcha la recuperación. En áreas de seguridad vemos avances en enfrentar al narcotráfico por vía marítima, gracias a la cooperación binacional. En el tema de gobernanza vamos a apoyar los esfuerzos. Veo oportunidades para avanzar juntos. Las respuestas que he recibido hasta ahora por el apoyo que da mi país es positivo. Hay interés en avanzar en transparencia y gobernanza.
¿Ha encontrado división sobre estos últimos temas en las reuniones que ha sostenido?
En las conversaciones que he tenido hay consenso en la necesidad de trabajar contra la corrupción y avanzar en la transparencia. Puede ser que se tengan diferentes ideas, pero es natural y parte de la discusión nacional. Veo interés en avanzar, empezando por el Gobierno y el resto de autoridades.
La CC tiene un papel fundamental en el sistema en Guatemala. Veo que es una institución clave para la justicia y para avanzar en el fortalecimiento de la democracia. El proceso que viene, esperamos que sea transparente y de acuerdo a las leyes de Guatemala.
¿Cómo lograr la certeza jurídica cuando se tiene un año sin elegir cortes y hay fallos judiciales que favorecen a corruptos?
La elección de cortes es muy importante. En cualquier sociedad democrática, el poder judicial es fundamental para preservar la justicia. Estamos interesados en el proceso de elección de magistrados, esperamos que sea constitucional y transparente, para tener un sector judicial fuerte que proteja la seguridad jurídica.
En términos de inversión, de seguridad para los inversionistas, también se deben ver los procesos. Por ejemplo, en los puertos, cuando vienen o salen productos, es importante que existan procesos transparentes. También en el pago de impuestos es necesario tener procesos transparentes.
Hay aspectos técnicos en los que estamos ayudando para que con formatos digitales o consolidados se pueda reducir la corrupción y facilitar el comercio transparente, y hacer negocios con confianza.
Eso también es importante para los consumidores, pues necesitan tener transacciones con transparencia. Eso reduce también los precios y es vital para el clima de inversión.
La Corte de Constitucionalidad (CC) ha recibido varios ataques de cara a su renovación, el próximo año. ¿Qué opina?
La CC tiene un papel fundamental en el sistema en Guatemala. Veo que es una institución clave para la justicia y para avanzar en el fortalecimiento de la democracia. El proceso que viene, esperamos que sea transparente y de acuerdo a las leyes de Guatemala.
A la CC se le ha desobedecido y en su país las órdenes de la Corte Suprema se cumplen. ¿Qué mensaje daría al respecto?
Como diplomático quiero resaltar que Guatemala debe seguir sus procesos y su Constitución. Eso es lo que le interesa a Estados Unidos. Todo debe ser resuelto de acuerdo a la ley, para el bien del país.
¿Está en su agenda reunirse con el Congreso, tomando en cuenta que ahí se elige a las cortes?
Espero tener la oportunidad de reuniones en el Congreso en las próximas semanas.
¿Le preocupa a Estados Unidos que la pandemia aumente el flujo migratorio a ese país?
Vamos a seguir apoyando en donde podamos dar respuesta. Es importante enfrentar la pandemia como región. Personas pasando por fronteras pueden llevar el virus a otros países.
El flujo migratorio sí ha subido en últimos meses, y eso es parte del impacto de la pandemia en varios países. Vamos a trabajar con las autoridades de Guatemala para proteger las fronteras. Son muchos riesgos en viajar irregularmente; con la pandemia son mayores riesgos para todos.
Vamos a trabajar en Guatemala con la migración irregular, para crear condiciones económicas para que los que ven la opción de migrar tengan opción de quedarse.
La política de migración sigue igual, vamos a trabajar en la seguridad de las fronteras. Para largo plazo debemos crear alternativas a la migración, eso empieza con la prosperidad y la seguridad de las comunidades.
Capital privado es clave
Consultado sobre los avances y futuro de la iniciativa del gobierno de Estados Unidos para el desarrollo de América Latina, llamado América Crece, el diplomático expuso: “Tenemos más recursos con DFC (siglas en inglés de Corporación Financiera de Desarrollo Internacional de Estados Unidos), que ha identificado a Guatemala como un país prioritario. Y ahora tenemos más flexibilidad para financiar a compañías estadounidenses y guatemaltecas que están haciendo negocios con Estados Unidos. Espero tener a través de esta iniciativa apoyar la inversión en infraestructura, energía, transporte, sobre todo en áreas donde hay necesidad de invertir.
Vamos a seguir apoyando la generación de empleos formal. Hay varias iniciativas, como la ruta —lanzada en septiembre— que se está trabajando junto con el gobierno de Guatemala para conectar las comunidades indígenas, con el gobierno y la iniciativa privada para impulsar proyectos que generen empleo formal y ayuden a las pequeñas y medianas empresas.
Podemos agilizar el comercio y las transferencias. Eso es clave para la economía internacional. Debe ser transparente y eficiente. Por eso vamos a apoyar eso. Mucho del financiamiento vendrá por el sector privado de los dos países. Antes de venir a Guatemala hablé con compañías que están dispuestas a invertir en Guatemala. Guatemala tiene ventajas, geográficamente cerca a EE. UU. y están buscando opciones para instalar cadenas de producción en Guatemala y hacer negocios. La Embajada servirá para hacer puentes para beneficio de los dos países. Apoyar la seguridad jurídica es muy importante para las compañías que quieran venir a Guatemala. Las oportunidades para inversión y comercio van a venir cuando exista seguridad jurídica”.