“No la respondí porque la directriz nuestra es no reunirnos con alguna de las personas que hasta el momento han manifestado que quieren ser candidatos”, aseguró Blanco.
El parlamentario argumentó que no se reunirán con Arzú Escobar, ni con otro candidato a la presidencia, porque consideran que ninguno tiene los votos y “porque su candidatura generaría una poralización”, y es lo que menos quieren.
Nineth Montenegro, jefa de la bancada Encuentro por Guatemala, indicó que el ambiente que se vive en el Congreso es incierto y preocupante, que la candidatura de Arzú Escobar ya se había escuchado entre noviembre y diciembre pasado.
“No hay pronunciamiento y hay silencio total respecto a él. Tampoco se dice quiénes serían las personas que irían con Álvaro Arzú Escobar”, aseveró Montenegro.
La legisladora indicó que este tipo de situaciones lo único que hace es crear “un ambiente de incertidumbre y de mayor duda”.
Agregó que sigue pasando que salen postulaciones sorpresivas sin saber quiénes son los que lo acompañan en una posible planilla.
“El aval de los bloques que están aliados… Entiendo que le habían dado el aval al diputado Conde y ahora es el diputado Arzú”, dijo este martes Óscar Chinchilla, presidente del Congreso, al referirse de las fuerzas para elegir a su sustituto.
“Intereses particulares”
Pero para la politóloga Heidy de Matta, las pugnas que se presentan para colocar a su candidato en la presidencia de la Junta Directiva del Congreso, se debe a “intereses particulares y no a los de la Nación”, las cuales en lugar de fortalecer al Organismo Legislativo producen un efecto contrario.
“Es una burla a la ciudadanía, los gobernantes y quienes ocupan los cargos públicos deben entender que en el ejercicio del poder de sus funciones y atribuciones existen límites, y que nadie está por encima de la Ley”, aseveró Matta.
Además dijo que “el haber participado en el pacto de corruptos cuestiona la idoneidad para ocupar dicho cargo y se cuestionan los intereses que pueden estar detrás en aras de consolidar ese mismo estatus quo”.
A criterio de Matta esas acciones no coinciden con la demanda social y de la comunidad internacional de “una agenda clara en contra de la corrupción y al abuso de autoridad”.