La propuesta contempla el racionamiento de las bolsas no biodegradables, tanto en su uso como en la fabricación y distribución en el país de estos productos.
De la basura que se genera en el país el 44 por ciento es orgánica, el 18 por ciento papel y el 13 por ciento plásticos, según estimaciones.
El Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales sería el ente rector y regulador de este tema, de acuerdo al proyecto de ley de Alejos.
Las ley busca, de ser aprobada, que se elimine de manera paulatina, en un período de cuatro años, el uso de bolsas plásticas en el país y se remplacen por reutilizables, como un aporte a la conservación del medio ambiente.
Establece el proyecto de ley multas de Q10 mil hasta Q35 mil por el incumplimiento de los parámetros de distribución y comercialización de estos productos.
En Sololá
En San Pedro La Laguna, Sololá, el uso de bolsas plásticas ya está regulado por la comuna, que el pasado 7 de octubre acordó prohibir la venta y distribución de estos productos.
Explica que toda persona que individual o jurídica que haga uso de estos productos de único uso inútiles y no reusables, como pajillas duroport y sus derivados, será sancionada con una multa de Q300.
Advierte que las empresas que comercialicen y distribuyan bolsas plásticas y los otros dos referidos productos, en San Pedro La Laguna, serán sancionadas con una multa que asciende a los Q15 mil.
Basura sin control
De los 340 municipios, ninguno tiene un manejo, ni siquiera aceptable, de los desechos. Es más, algunos afrontan problemas de contaminación tan graves que sus reservas de agua están amenazadas.
La crisis reciente de recolección de basura en Quetzaltenango, la multa impuesta el 3 de octubre por el Ministerio de Ambiente a la Municipalidad de Antigua Guatemala por falta de estudio de impacto ambiental en el vertedero y la creciente presión hacia la comuna de Guatemala para cerrar el basurero de la zona 3 no son situaciones aisladas.
Los datos del Atlas de residuos registran que Guatemala genera tres millones 95 mil 994 toneladas de desechos, con lo que se convierte en el país que produce más contaminación en Centroamérica.