Actualmente la carretera al Occidente es de uso masivo. Unos 150 mil automotores, aproximadamente, circulan cada día por la carretera de Chimaltenango, pero en días festivos pueden ser 200 mil, lo que provoca a diario fuerte congestionamiento que se traduce en filas de hasta más de dos horas para atravesar un tramo menor a 10 kilómetros.
De ahí la importancia de que el Congreso autorice la expropiación de unos 70 terrenos que, por el momento, son propiedad privada y evitan que se continúe con la construcción del libramiento, que promete acabar con los problemas de tránsito en el área, beneficiando al turismo y comercio, principales sectores afectados.
Temores y arrepentimientos
Carlos Chavarría, diputado del bloque Compromiso Renovación y Orden (Creo) y ponente de la iniciativa en mención, espera que esta pueda ser aprobada mañana en la sesión plenaria.
“Esperaría que mañana pase. Nosotros tenemos una enmienda en el artículo 2 que es precisamente para que quede bien definido en la ley que la expropiación es exclusivamente para el plano del libramiento de Chimaltenango”, señaló el congresista.
Destacó que uno de los principales problemas para aprobar este decreto es que “las personas tienen fantasmas de que con esta ley se podrá comenzar a expropiar por otro lado y que esto abrirá un camino para las expropiaciones en el futuro, y no es así”.
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“Esta expropiación quedará específica para el tramo, que son 15.23 kilómetros, y única y exclusivamente para este tramo. Vamos a definir bien el nombre en la iniciativa, entendemos los temores de las personas, pero esto es un tema de utilidad nacional”, aseguró Chavarría.
El parlamentario considera que no tener bien redactado el artículo número dos fue uno de los puntos que pudo haber detenido la aprobación en sesiones anteriores de la iniciativa.
“Le hago un llamado a los diputados, por ejemplo yo represento al distrito de Alta Verapaz, pero atendí el llamado de los alcaldes de Chimaltenango y Totonicapán, por lo que le pido a los diputados de Occidente y todo el país para que se sumen, pues esto no es un interés personal sino un bien común”, concluyó el diputado.
José Alejandro De León, electo por el distrito de Chimaltenango, destacó que este proyecto se ha venido fiscalizando durante años y ha tenido muchas vicisitudes en todo el camino pero ahora ya está cerca de ser aprobado.
“Esta no es una situación actual sino que han sido años los que se han dedicado a este proyecto. Es cierto que ha existido falta de voluntad de las autoridades no solo en este Gobierno sino en anteriores”, aseveró De León.
El congresista aseguró que aprobar la ley será solo un paso más en el largo trayecto que ha tenido que recorrer el proyecto.
“Siempre hemos llamado al diálogo y convocado a reuniones las cuales se han hecho. Para avanzar miramos como una buena alternativa que se apruebe la ley”, destacó el parlamentario.
Agregó que muchas veces se ha desinformado y algunas han tergiversado la información, pero al final las personas tienen que estar seguras que el proyecto vendrá a beneficiar no solo a Chimaltenango sino a todo el occidente del país.
Largo proceso
La iniciativa fue presentada a la Dirección Legislativa el 16 de octubre de 2017 y un día después fue conocida por el pleno y trasladada a la Comisión de Comunicaciones.
Luego de su discusión en la sala de trabajo el dictamen con enmiendas fue entregado a la Dirección Legislativa, el pasado 8 de mayo.
Fue hasta el 7 de agosto de último que fue agendada la iniciativa en el Orden del Día para que fuera discutida en el Pleno en primer debate. Así comenzaba el trámite legislativo que incluye la aprobación en tres lecturas en sesiones distintas, y una aprobación final por artículos y redacción final de la propuesta, antes de enviarla a sanción del Ejecutivo.
En esa ocasión los diputados que tomaron la palabra discutieron sobre la importancia de este proyecto e indicaron que era necesario y de interés nacional aprobarlo. Se aprobó la primera lectura.
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En la siguiente sesión, el 8 de agosto, fue agendada de nuevo la propuesta de ley para ser discutida en segundo debate y este se realizó sin mayor contratiempo.
En la siguiente sesión plenaria, que se realizó el 14 de agosto, se tenía contemplada la interpelación del ministro de Salud Carlo Soto, sin embargo esta fue retirada ese mismo día y el pleno acordó que en su lugar se discutiera en tercer debate por artículos y redacción final la iniciativa.
El tercer debate fue aprobado con 85 votos a favor, posteriormente los diputados entraron a conocer el proyecto por artículos; ahí estuvo el primer tropiezo: solo se logró la aprobación del primer artículo en su redacción final.
A partir del artículo 2 los diputados intentaron en dos ocasiones hacer enmiendas de curul, pero al no conseguirlo el quórum se rompió y la aprobación se suspendió.
Casi 15 días y dos sesiones plenarias después, la discusión por artículos y redacción final de la iniciativa 5367 ha estado agendada, pero ha caído en orden de prioridades en la agenda parlamentaria.
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En las últimas dos sesiónes, del 21 y 22 de agosto, justo cuando tocaba reanudar la discusión del proyecto de ley, los diputados se retiraban y se levantaba la sesión, por no haber la asistencia mínima de 80 diputados para continuar.
Para esta semana los jefes de bloques acordaron que la iniciativa se agende por tercera vez consecutiva, en un nuevo intento de aprobarla por artículos y redacción final, pero está en el punto octavo de la agenda, por lo que hay posibilidad de que se rompa el quórum antes de que los congresistas lo conozcan.
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