Sobre este señalamiento, el primer vicepresidente del Congreso, Felipe Alejos, indicó que se realizará un análisis de esta situación, pero dijo que si los sindicalistas tenían pruebas sobre ilegalidades que las presentaran.
Según el Stol, a partir de esta semana rescindieron unos 60 contratos, aunque solo cinco corresponderían a las nuevas contrataciones.
“Según los datos que nosotros tenemos del personal que denunciamos, que entraron entre mayo y junio, solo cinco personas sacaron, por decirlo así”, afirmó Xiomara Conde, secretaria general del Stol.
Conde agregó que las demás destituciones fueron entre personas que tenían entre tres y seis años de estar laborando en el Congreso.
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“Obviamente los sacaron porque necesitaban justificar sacar personas para meter más. Pero lo malo acá es que las personas que sacaron son personas que tenían años -de trabajar- y sus salarios eran de Q4 mil y eso no afectará mucho en el presupuesto mensual”, señaló la sindicalista.
Aseguró que el Stol prevé que esta situación lo que provocará es que las personas de renglón 022 luchen legalmente por su reinstalación y la ganen.
“Estas personas podrían pedir los datos a asesoría jurídica. Por ejemplo, esta semana reinstalaron a más de cinco personas que en el 2017 pelearon el contrato 022 porque no les fue renovado y vinieron las reinstalaciones”, afirmó Conde.
Sobre esta situación fue consultado Estuardo Galdámez, primer secretario de la Junta Directiva del Congreso, quien afirmó que los cambios corresponden a una reestructuración del Organismo Legislativo.
El congresista indicó que se evalúan los perfiles de los trabajadores temporales para saber si llenan calidades o si son necesarios sus servicios. Agregó que posteriormente se hará el mismo análisis con el personal permanente.
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“Queremos ser más estrictos y más específicos en cuanto a la delicadeza de cada contratación. Lo que se hace es ver el perfil y capacidad de cada quien para poder ocupar los puestos dentro del Congreso”, señaló Galdámez
Críticas
Orlando Blanco, jefe de la bancada Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), sobre las contrataciones ha dicho que el año pasado tenía que haberse desarrollado un proceso de evaluación de desempeño para evitar estas situaciones.
“Se realizó un proceso pero a todas luces fue muy condescendiente y la mayoría de personas salió muy bien calificada. Creemos que hay personas que está ocupando un puesto que no se necesita en el Congreso”, consideró Blanco.
El diputado consideró que hay una sobrepoblación de trabajadores. “Hay que recordar que persisten clanes, que hay gente que gana más que un diputado. Lo que vemos es un dato que molesta pero hay responsabilidades concretas en las Juntas Directivas del 2017 y 2018”, insistió Blanco.
Carlos Fión, jefe de la banda Compromiso Renovación y Orden (Creo), también ha insistido en una revisión al pacto colectivo porque tiene elementos lesivos.
Sobre los casos de personas que ganan más que un diputado en el Congreso, indicó que no se puede hacer nada, pues ellos estaban antes de que entrara en vigencia la ley que prohíbe que los trabajadores ganen más que un legislador.
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