Guatemala
Aumento de salario para diputados: La otra ocasión en que se aprobó una medida similar y provocó polémica
La última vez que los diputados aprobaron su aumento salarial, hubo críticas y rechazo de la sociedad. En esa ocasión, se recolectaron firmas en contra de la medida y hubo diputados que incluso rechazaron recibir el dinero.
Un total de 87 diputados de la legislatura actual aprobaron el aumento de salario para su cargo previsto para el 2025. La medida se aprobó el 26 de noviembre de 2024 en una extensa sesión. (Foto Prensa Libre: Óscar Vásquez)
Muy parecido a lo que ocurre en la actualidad, hace 24 años se dio un aumento salarial para los diputados que consistía en Q5 mil más con lo que se alcanzó el monto de Q30 mil 050 mensuales. Esto generó críticas y una reacción de contundente rechazo por parte de la sociedad guatemalteca.
Había inconformidad, cuestionamientos e incluso recolección de firmas en contra de ese aumento de Q5 mil más, que se justificó bajo el rubro de "gastos de representación".
Era el año 2000, un nuevo milenio y un nuevo presidente en el Congreso de la República: el general Efraín Ríos Montt, del Frente Republicano Guatemalteco (FRG), quien, a pesar de la oposición, no dio marcha atrás.
Ese fue el último aumento, pero en la legislatura anterior ya se había aprobado un incremento significativo de Q7 mil 400 más al salario de los legislasdores, que incluía otros beneficios como dietas, gastos por trabajo en comisiones, uso de celular y correspondencia.
Entonces, en menos de una década, los ingresos de los diputados pasaron de Q17 mil 650 a Q30 mil 050, acumulando aumentos que incluían conceptos adicionales como "gastos de representación".
¿Cuándo se dio el aumento?
En sus primeros días en el Congreso, Ríos Montt implementó cambios como adelantar las sesiones y declaró que el Legislativo se convertiría en un "centro de control y fiscalización".
Para lograrlo, autorizó como incentivo un aumento salarial de Q5 mil más bajo el concepto de "gastos de representación", justificándolo como insuficiente para el trabajo de fiscalización.
"Siempre tiene uno que mentir y engañar; nosotros no tenemos que pedir nada por favor, sino por obligación", dijo entonces.
Con 113 diputados, la medida condicionó el cumplimiento de sus funciones, bajo amenaza de sanciones económicas. Algunos la vieron como una forma de consolidar su poder sobre los congresistas, recordando su gestión entre 1982 y 1983.
El aumento fue polémico, con diputados como Leonel López Rodas, del PAN, rechazando la imposición, mientras otros aceptaron que los Q5 mil eran un incentivo para seguir las órdenes del general.
Ríos Montt defendió la medida, asegurando que no era un aumento salarial, sino un "gasto de representación", para evitar excusas en el cumplimiento de sus funciones.
La polémica se intensificó con la oposición de diputados distritales al aumento salarial en el área metropolitana, a lo que Ríos Montt respondió: "Aquí en la capital, tienen que trabajar más".
Mientras tanto, trabajadores del Congreso criticaron el incremento, considerándolo un "aumento disfrazado".
¿Cuánto era y cuánto aumentó?
El aumento de Q5 mil bajo el concepto de "gastos de representación" elevó el salario de los diputados a Q30 mil 050, superando el sueldo de los ministros de Estado.
La medida fue aprobada por la Junta Directiva del Congreso y entró en vigor de forma inmediata, aunque condicionada al cumplimiento de las labores de fiscalización, que se realizaban los jueves y viernes y debían documentarse en informes entregados los lunes.
Según los registros de la cobertura de Prensa Libre, se destacó que, en menos de una década, los salarios de los congresistas habían aumentado significativamente.
En la legislatura anterior de Leonel López, el salario base de los diputados era de Q8 mil 050, y se añadían Q9 mil 600 en dietas, alcanzando así un total de Q17 mil 650.
Durante su administración, primero recibieron un aumento de Q1 mil 700, seguido de Q5 mil más por dietas de trabajo en comisiones, Q500 por uso de celular y Q200 para correspondencia.
Este aumento fue significativo, y en menos de una década, los ingresos de los diputados pasaron de Q17 mil 650 a Q30 mil 050 entre las dos legislaturas, acumulando aumentos por esos conceptos.
Reacciones
El aumento salarial de Q5 mil autorizado por Ríos Montt generó fuertes críticas en varios sectores de la sociedad, que lo consideraron desproporcionado, especialmente frente a las necesidades económicas de los sectores más vulnerables del país.
El Frente de Pobladores de Guatemala (Frepogua) inició una campaña frente al Congreso, recolectando firmas en rechazo a la medida.
Mientras tanto, Leonel Soto Arango, primer viceministro del Congreso, defendió el incremento, y argumentó que el trabajo de fiscalización realizado por los diputados en sus departamentos justificaba el aporte de recursos.
Sin embargo, organizaciones como la Federación Campesina y Popular, representada por Manuel Pablo Quino, calificaron el aumento de "ofensa" para los trabajadores del campo, y José Pinzón, de la Central General de Trabajadores de Guatemala, pidió a los diputados que no se enriquecieran con los impuestos de los ciudadanos.
La oposición se mostró en contra, considerando que la fiscalización era parte del trabajo legislativo.
El 28 de enero de 2020, la bancada de la coalición URGN-DIA (Alianza Nueva Nación, ANN) expresó oficialmente su desacuerdo, y señaló que el aumento había generado descontento en la población y que el Congreso se veía perjudicado innecesariamente en su imagen.
Los nueve diputados de esa bancada pidieron a la Junta Directiva suspender el incremento.
Carlos Wholers, primer secretario del Congreso, aclaró que la bancada tenía derecho a rechazar el dinero, pero que debía cumplirse con el trabajo de fiscalización y presentar un informe.
Además, explicó que la medida había sido planteada por la anterior Junta Directiva, presidida por el PAN, que había incrementado la partida presupuestaria para elevar el salario de los diputados a Q8 mil. Agregó que, para justificar la medida, pensaron que lo mejor era obligar a los diputados a trabajar en el área de fiscalización.
Intento fallido
En 2017, hubo un intento de unificar los salarios y aumentar el total mensual. El plan incluía incorporar bonos en los ingresos totales y establecer nuevas dietas.
Se planteaba desde ya que el salario se asemejara al de un magistrado de Apelaciones, alcanzando entre Q35 mil y Q40 mil.
Aunque esa propuesta no prosperó, el Congreso sí aprobó un acuerdo para que el bono 14 y el aguinaldo se pagaran sobre el ingreso total y no sobre el salario base.
Desde ese momento, no hubo más cambios, salvo el previsto para 2025.
¿En qué consiste el aumento recién aprobado de 2024?
El acuerdo aprobado (31-2024) establece que los 160 diputados recibirán un salario y retribuciones no menores a los de los magistrados de la Corte de Apelaciones, lo que implicaría un aumento considerable en sus ingresos.
Este incremento podría representar un aumento de aproximadamente Q22 mil 789 para los diputados, ya que pasarían de recibir Q29 mil 150 a un monto cercano a los Q51 mil 939 que ganan los magistrados.
Actualmente, los magistrados reciben un total de Q51mil 939 al mes, compuesto por:
- Q46,700 de salario base
- Q1,600 de bono mensual
- Q375 de bonificación profesional
- Q3,264 en gastos de representación
En comparación, los diputados actualmente ganan Q29 mil 150 mensuales, que incluyen:
- Q9,550 de salario base
- Q5,000 en gastos de representación
- Q9,600 por asistir a las plenarias
- Q5,000 por integrar comisiones de trabajo
- Q5,000 en dietas por asistir a las comisiones
Los directivos y jefes de bloque reciben un salario adicional por concepto de gastos de representación, que va de Q10 mil a Q20 mil, y Q1 por cada sesión de la Junta Directiva y por cada reunión de jefes y subjefes de bloques.
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