Este jueves 16 de enero se presentó la Política General de Gobierno, el cual regirá los destinos del gobierno de Giammattei y que se desarrolló en conjunto con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de la Organización de las Naciones Unidas.
Esa Política se basa en el Plan Nacional de Innovación y Desarrollo que fue la propuesta de trabajo de Giammattei durante la campaña electoral del 2019, pero también integra el Plan Nacional K´atun Nuestra Guatemala 2032, que a la vez se adaptó a los Objetivos de Desarrollo Sostenibles impulsados por las Naciones Unidas.
La guía del nuevo gobierno se basa en cinco pilares, el tercero se refiere a la gobernabilidad y seguridad en desarrollo.
Las primeras tres metas de este pilar son:
- Reducir el índice de criminalidad en 20 puntos porcentuales
- Reducir la tasa de homicidios en 8.8 puntos porcentuales
- Incrementar en cuatro el número de centros penitenciarios
Durante los próximos cuatro años, el Gobierno buscará mejorar la gobernabilidad del país, para generar condiciones adecuadas para la inversión. Aquí se priorizará la seguridad y la justicia para todos, con metas que incluyen sumar cinco mil agentes de la Policía Nacional Civil a las filas de la institución y reformar el sistema de inteligencia del Estado.
La administración de Giammattei considera que la gobernabilidad está estrechamente vinculada con el desarrollo social, familiar e individual, aspectos necesario para alcanzar el bienestar, por lo que se pondrá énfasis en el respeto, promoción y tutela de los derechos humanos.
También buscan integrar 340 organizaciones comunitarias de prevención -una por cada municipio- e incrementar en cuatro los centros penitenciarios del país.
El Ejecutivo apuesta a la prevención para disminuir los índices de criminalidad, pero también se reaccionará ante el tráfico de drogas, armas y personas en las fronteras, la conflictividad social y el fortalecimiento al sector justicia.
La promesa es tener un trabajo coordinado entre las fuerzas de seguridad, el control de las cárceles y de las redes delictivas.
“Los indicadores sustantivos de la seguridad muestran a una Guatemala sumamente violenta, pese a que en los últimos años se han tenido resultados favorables”, se indica en el documento.
Para el 2019, la tasa de homicidios en Guatemala fue de 20 por cada cien mil habitantes, pero la media mundial es de 6.1 y la del continente es de 17.2, según las Naciones Unidas.
Al desagregar el nivel de violencia por departamentos, Zacapa tiene una tasa superior, con 59 por cada cien mil habitantes, le siguen Escuintla, con 51, y Guatemala con 42, después están Chiquimula e Izabal con 39 y 36, respectivamente.
En la política, el gobierno también considera el fortalecimiento del Ministerio Público, la Policía Nacional Civil y el Organismo Judicial por medio de refuerzo financiero, científico y técnico; además de aumentar la presencia de jueces y agentes policiales en todo el país.
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