En la entrevista con la periodista de Univision, Ilia Calderón, del Noticiero Univision, Harris no precisó la fecha en que su Gobierno presentará el proyecto de ley de reforma migratoria, aunque Biden se comprometió a promover una reforma migratoria integral en sus primeros cien días en el poder.
El plan allanaría el camino para que millones de indocumentados que residen en Estados Unidos logren convertirse en ciudadanos, tras un proceso de años en el que primero tienen que alcanzar el estatus de residentes legales permanentes.
La exsenadora por California se refirió también a la implementación de una política de asilo que contemple una “asesoría legal de las personas que buscan refugio” en este país y la disposición de fondos que ayuden al desarrollo de la paz de Guatemala, Honduras y El Salvador, el llamado Triángulo Norte Centroamericano, y México.
TPS y Dreamers
La vicepresidenta electa, hija de origen indio y jamaicano, se refirió también a la situación de los jóvenes inmigrantes indocumentados conocidos como “dreamers” (soñadores), que llegaron al país antes de cumplir los 16 años, para quienes, dijo, se extenderán las “protecciones”.
Al igual que para los inmigrantes que viven amparados por los Tratados de Protección Temporal (TPS), quienes podrían obtener automáticamente tarjetas de residencia.
Kamala Harris dijo que el nuevo gobierno evocará las intenciones bipartidistas de 2013 por alcanzar una reforma migratoria. “No será fácil”, reconoció.
Y subrayó que el nuevo Gobierno va a “reconocer y agradecer a los más de 200 mil ‘soñadores’ que han sido trabajadores fundamentales durante la pandemia de la covid-19”.
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En ese contexto, Harris dejó claro que la voluntad del nuevo Gobierno será asegurarse de que “las personas reciban vacunas independientemente de su estado migratorio”.
El proyecto del plan de reforma migratoria prometido por Biden apostaría por mantener unidas a las familias migrantes en la frontera, “no dividirlas”, además de asegurarse, agregó Harris, de que los “niños que lleguen a la frontera tengan asesoría legal” y “sean tratados de manera justa”.
Harris recordó que en 2013, antes del Gobierno de Trump, había republicanos dispuestos a sacar adelante un plan de reforma migratoria integral que luego fue desestimado por la Cámara de Representantes.
Por ello, confía en que el “enfoque” de su Gobierno tenga “cierto apoyo bipartidista”, aunque “no será fácil”, reconoció.