En un comunicado, la Guardia Nacional indicó que a las 1.40 horas (07.40 GMT) del domingo agentes de la coordinación regional “Chiapas 11” reportaron que tres vehículos evadieron un puesto de seguridad en el municipio de Huixtla y luego se encontraron “de frente” con una camioneta a cuyo conductor le marcaron el alto.
“Contrario a las instrucciones, el conductor intentó embestir a los elementos de la Guardia Nacional acelerando la marcha del vehículo, por lo que ante la respuesta del conductor y al verse en riesgo inminente su integridad, accionaron sus armas para detener el vehículo logrando la detención de su marcha aproximadamente 50 metros adelante”, expuso la institución.
Señalaron que del vehículo descendieron varias personas que intentaron correr en distintas direcciones, sin embargo fueron arrestadas, mientras que en el interior había “cuatro personas que se encontraban lesionadas, así como una que no presentaba signos vitales”, aunque no precisó más datos.
La Guardia Nacional dijo que proporcionó de inmediato los primeros auxilios a los heridos, quienes posteriormente fueron trasladados al hospital regional para su atención.
Señaló que fue arrestado el conductor de la camioneta, quien quedó a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR) y también fueron detenidos nueve migrantes de diferentes nacionalidades en coordinación con el Instituto Nacional de Migración (INM).
El domingo, la Fiscalía de Chiapas abrió una investigación por el homicidio a disparos de un migrante cubano que fue encontrado cerca de un vehículo en un camino rural del municipio de Pijijiapan, en Chiapas.
Activistas que acompañan a la caravana migrante, como Irineo Mujica de Pueblo Sin Fronteras, denunciaron este lunes que la Guardia Nacional de México atacó a balazos a varios migrantes, causando al menos 13 heridos.
La región vive una ola migratoria sin precedentes desde comienzos de año, con un flujo histórico de 147 mil indocumentados detectados en México de enero a agosto, el triple de 2020.
Este grupo -que lleva más de una semana de camino- se puso en marcha luego de que en los primeros días de septiembre las autoridades mexicanas frustraran el avance de cuatro caravanas de migrantes que partieron precisamente desde Tapachula, municipio de Chiapas fronterizo con Guatemala.
Entonces, varias agencias de la ONU y ONG criticaron el uso de la fuerza en los operativos para desintegrar dichas caravanas.