Aseguró que, en sus testimonios, los migrantes afirman que en Honduras les ofrecieron una visa humanitaria para transitar libremente por México.
Otro de los aspectos atípicos de la marcha, puntualizó García, es el que los migrantes manifiestan que les indicaron que tanto en Guatemala como en México había centros específicos a dónde debían llegar a pedir auxilio porque serían recibidos y que no debían preocuparse.
“Nunca les dijeron que se avocaran a embajadas, consulados o a las autoridades”, afirmó el funcionario.
García precisó que otra de las características que hace sospechar a los vicecancilleres de que la marcha sea genuina es que tanto para salir de Guatemala como para ingresar a México los grupos colocaban al frente a mujeres y niños y personas vulnerables.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México emitió un comunicado en el cual afirmó que las caravanas que marchan por ese país son parte de “un flujo inédito y atípico de migrantes” y que por lo tanto requiere una atención especial de parte de los gobiernos para garantizarles sus derechos humanos.
El comunicado indica que “los cuatro países acordaron profundizar y agilizar el intercambio de información relevante para atender las peculiaridades del flujo migratorio”.
Después de una visita que efectuó a Guatemala, el comisionado de los Derechos Humanos de Honduras, Roberto Herrera, indicó que, independientemente de si hubo motivaciones de tipo político para movilizar a miles de personas, las causas de la migración, que principalmente son la pobreza y la violencia, deben atenderse.
“En el caso de los defensores de los pueblos, solo vemos al ser humano y sus familias y los problemas que hay que atender”, indicó Herrera.
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No obstante, indicó que “en todo proceso migratorio se pueden encontrar otro tipo de intereses que también se movilizan”.
Añadió que las causas estructurales que motivan la migración deben ser atendidas para prevenir más migraciones forzadas.
Miles marchan
Desde el 13 de octubre pasado un grupo nutrido de hondureños partió de su país con la intención de llegar a Estados Unidos con la esperanza de encontrar trabajo y un futuro mejor para sus familias. Todos dicen que huyen de la pobreza y la violencia que golpea a Honduras y culpan de la situación al presidente Juan Orlando Hernández.
Días después otro grupo de cientos de hondureños los siguió, y ahora se suman cientos de salvadoreños que también buscan el “sueño americano”.
Hasta esta semana la Casa del Migrante de Guatemala daba cuenta de que había atendido a cerca de 13 mil migrantes que buscaban auxilio a llegar a la sede de la zona 1, mientras que el gobierno de Honduras destacaba que casi cinco mil habían retornado desde Tecún Umán, San Marcos.
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