De acuerdo con The New York Times, la administración busca “descertificar”a la Asociación Nacional de Jueces de Migración (NAIJ, en inglés), un sindicato de jueces, con el argumento de que son “funcionarios administrativos” y no elegibles para organizarse.
Cabe destacar que, si bien se trata de una rama de la justicia, los jueces pertenecen al Departamento de Justicia, es decir al gobierno federal.
Esto abrió una nueva confrontación entre Trump y los jueces, que no han ahorrado palabras en señalar que el presidente estadounidense “no entiende absolutamente nada en política internacional y no tiene ni la más mínima idea de cómo lidiar con el reto de la migración”.
Por su parte, Trump ha sostenido que quiere “deshacerse” de los jueces de migración y acabar con el sistema de asilo porque no funciona.
Lea más: ICE irá tras las empresas estadounidenses que contratan indocumentados
Univisión habló con Dana Leigh Marks, presidenta honoraria de la NAIJ, quien criticó el bloqueo que la administración pretende hacer a la organización.
“Es un intento equivocado de silenciar a los jueces de Inmigración que han criticado las prácticas de gestión y las invasiones en la independencia judicial que han aumentado dramáticamente en los últimos dos años”, dijo.
La jurista recordó que una maniobra similar ocurrió en 20 años y creyó que estaba solucionada.
“Hace veinte años, el Departamento de Justicia intentó la misma táctica buscando clasificar a los jueces como gerentes y formuladores de políticas para que no pudieran organizarse y hablar cuando no están de acuerdo con la política del departamento”, expuso a la cadena de televisión.
Recordó que la Autoridad Federal de Relaciones Laborales resolvió que los jueces no tienen un papel en el desarrollo de la política sino que son expertos técnicos en migración.
Los jueces acudirán al Congreso, de mayoría demócrata y también crítica de Trump, para “combatir este ataque injustificado contra nuestra independencia”.
Consultado por Univisión, Víctor Nieblas, expresidente de la Asociación Americana de Abogados de Migración, consideró que forzar el silencio de los jueces es “acercarnos un paso más al autoritarismo en el campo de la ley de migración”.
Observó que el presente es un ejemplo del por qué debe existir independencia entre los jueces de migración y la administración federal.
“No puede ser que el Ejecutivo arreste a inmigrantes y busque su expulsión de Estados Unidos, y que también controle completamente el sistema judicial, que promete un juicio justo”, dijo Nieblas.
Contenido relacionado
> Redadas en Misisipi: “Parecía una película de terror, la mayoría desapareció”