En ese país radican más de tres millones de guatemaltecos, 800.000 de ellos en condición de indocumentados, de acuerdo con el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex).
De enero a noviembre del año pasado fueron retornados 60 mil 73 guatemaltecos desde Estados Unidos y México, 30.6 por ciento menos que el año pasado. Expertos lo atribuyen a las políticas antimigrantes del presidente Donald Trump, y también a que las personas analizan mejor su intención de viajar a ese país.
Sin embargo, como la migración es un ciclo, no se va a detener, y podría haber un nuevo repunte, como la ola migratoria que en el 2015 llevó a más de 50 mil menores a viajar de manera irregular.
Los registros de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) revelan que 26 mil 538 personas menos han sido retornadas desde los dos países en mención. En total, al triángulo norte de Centroamérica han sido devueltos 129 mil 209 migrantes, 35.5 por ciento menos que en el 2016.
Desde EE. UU. han vuelto a su país de origen 28 mil 691 adultos y desde México 23 mil 547 connacionales.
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De los deportados, tres mil 586 eran niños y adolescentes que viajaban solos. Tres mil 592 fueron encontrados en México, la mayoría se encontraba con otras personas que viajaban de manera irregular.
Solo 267 volvieron de EE. UU. y las causas más probables son que los casos en las cortes de inmigración no los favorecieron.
Al regresar a Guatemala, todos tienen en común la nacionalidad, pero no el lugar de origen. La mayoría procedían de Huehuetenango y San Marcos —974 y 969, respectivamente—.
Los retornos bajaron desde EE. UU. y México 30.6 por ciento.
Antes de migrar, muchos lo piensan dos veces. No se quieren arriesgar más de la cuenta. “De alguna manera hay desincentivación de la migración por las políticas antimigrantes de Trump. Creo que las personas están pensando menos en irse a EE. UU.”, opinó Úrsula Roldán, coordinadora del área de migraciones del Instituto de Investigaciones y Gerencia Política (Ingep), de la Universidad Rafael Landívar.
“De acuerdo con las declaraciones del Gobierno en años anteriores, hasta un 90 por ciento o más de las personas deportadas eran los capturados durante el viaje migratorio. Tomando en consideración esa base, la reducción tendría una fuerte influencia de viaje que emprenden los connacionales”, destacó Pedro Pablo Solares, asesor de la Iniciativa Puente Migraciones.
Según Roldán, todavía queda la posibilidad, aunque menor, de que México no esté deportando igual que antes, por las diferencias políticas con EE. UU. a principios del año.
“No puedo decir que la migración se esté deteniendo; son ciclos migratorios que se dan. Seguirá, pero depende de las políticas”, remarcó la coordinadora, quien cree que una ola migratoria se puede repetir.