Guatemala

Luna casi cubrió el Sol

Fenómeno causó ligero cambio de temperatura y acaparó la atención de los guatemaltecos

Tal y como se esperaba, ayer la Luna cubrió un ochenta por ciento del disco solar, en el primer eclipse del milenio para Centroamérica. Los guatemaltecos pudieron apreciar un descenso en la luz del Sol.

?Se registró como se había predicho, aunque no hubo un descenso tan grande de la luz solar?, señaló Eddy Sánchez, director del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología, Insivumeh.

Explicó que aunque el Sol se cubrió 80 por ciento, el 20 por ciento restante siguió irradiando mucha energía a través de una luz intensa.

La intensidad de la iluminación descendió a unos 800 vatios por metro cuadrado a eso de las 16:30 horas; usualmente se mantiene entre 900 y mil vatios. Al mediodía, la energía lumínica fue de 1,550 vatios por metro cuadrado, agregó.

Cambios en el ambiente

Sánchez también comentó que se notó un cambio en la coloración de las hojas de los árboles y plantas, así como un descenso en la temperatura en el orden de unos tres grados, y un incremento en la velocidad del viento, sin llegar a extremos.

?Fue algo maravilloso, es algo para recordar toda la vida?, expresó Edgar Castro, del Club de Astrónomos de Guatemala, quien se unió a otros cien aficionados se reunieron en la Plaza Berlín, zona 13, para apreciar el fenómeno.

?Fue como sentir las leyes de la gravitación universal, cuando se alinearon la Tierra, la Luna y el Sol?, expresó.

Con la vista al cielo

El fenómeno celeste fue observado por millares de guatemaltecos a lo largo del país, situación que denota el interés por la astronomía, gracias a la información difundida por los medios de comunicación, aseveró Castro.

La mayoría de quienes enfocaron su vista al cielo utilizó lentes especiales certificados por British Standars Institute. A eso de las 15 horas, en las tiendas Quick Foto casi se habían agotado los filtros, según comprobó Prensa Libre.

En la capital, a pesar de tener un cielo despejado, unos cuantos se animaron a presenciarlo desde la azoteas de los edificios más altos del Centro Histórico. Sin embargo, se supo que unos 50 mil lentes con filtros especiales fueron comprados por personas que no querían perderse el primer eclipse parcial del nuevo milenio.