Seguridad
Los métodos de contacto y formas de cobro que aplican extorsionistas, según análisis del Observatorio de Derecho de Propiedad
Aunque la principal exigencia es dinero, también les exigen bienes, firmar, suscribir, otorgar, destruir o entregar algún documento, lo cual incluye despojar de su vivienda o algún inmueble a la persona extorsionada.
Los extorsionistas no solo exigen a sus víctimas dinero sino bienes, como casas o inmuebles, según entidades. (Foto, Prensa Libre: Hemeroteca PL).
En el 2023 hubo 18 mil 085 denuncias por extorsiones y solo de enero a abril de 2024 se han registrado 6 mil 307, refieren estadísticas recopiladas por el Observatorio de Derechos de Propiedad (ODP).
Del 2018 a abril de 2024, la cifra acumulada llega a 89 mil 168 denuncias.
De estas, el 46.5% se han registrado en el departamento de Guatemala, con 41 mil 519, seguidas de Escuintla con 6 mil 212 y Quetzaltenango con 4 mil 465. En tanto Sacatepéquez, Suchitepéquez y Chimaltenango están en el rango de 3 mil a 4 mil denuncias acumuladas en ese plazo. Y entre 2 mil a 3 mil aparecen San Marcos, Santa Rosa, Jutiapa, Alta Verapaz, Huehuetenango y Retalhuleu. Entre los que menos denuncias reflejan están Totonicapán, Chiquimula, Zacapa, Baja Verapaz y Sololá, donde van desde 543 hasta menos de mil.
Por año, solo en 2023 en el departamento de Guatemala hubo 8 mil 977 y en Escuintla 1 mil 388. En tanto en el primer cuatrimestre de 2024, esos departamentos siguen teniendo los primeros dos lugares en denuncias con 2 mil 748 y 408 respectivamente.
Del total de denuncias en 2024 el 59.9% ha tenido una salida alterna, 37.7% sigue activo y 2.4% ha sido desestimado. En la recopilación efectuada por el observatorio a esta fecha aún no aparecen sentencias.
Si se habla del acumulado de 2018 a abril de 2024, el 82.6% ha tenido una salida alterna; 8.01% denuncias han sido desestimadas, siguen activos el 5.9%, pero solo el 2.5% tienen sentencia.
Aún así el nivel de desestimaciones ha bajado ya que en 2018 se ubicó en 13.7%, en el 2023 4.6%, y en el 2024 está en 3.1%.
El tiempo de resolución del caso es en promedio de un año, para el 84% de casos, pero el restante 16% lleva entre 2 a 6 años.
Por aparte, Andrea Cáceres, directora ejecutiva del observatorio, comenta que obtuvieron otros datos, pero con una encuesta de percepción que efectuaron de forma digital en junio de 2024. Esta fue respondida por 300 personas, y entre otros datos refleja los métodos de extorsión y formas de cobro.
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El 70% dijo haber sido víctima de extorsión, aunque se mencionó varios años desde 2008 hasta 2024, el período de mayor recurrencia de casos de extorsión fue el 2023.
- Y en esta medición, entre los departamentos más mencionados están Guatemala (67%), donde los municipios con mayor recurrencia fueron Guatemala, Villa Nueva, Mixco y Villa Canales.
- También los departamentos de Quetzaltenango (4%), Sacatepéquez, Alta Verapaz, y San Marcos con 3% cada uno.
Modalidades de extorsión y formas de cobro y contacto
Entre los resultados se evidencia que alrededor del 70% de los extorsionadores se ponen en contacto con sus víctimas por teléfono y casi 20% en forma personal y 12.7% por mensajes de texto.
Acerca de otras vías de contacto también se mencionan redes sociales. Había opción de respuestas múltiples por lo que se reflejan en las respuestas:
- Mensajes vía WhatsApp (11.63%) y llamadas telefónicas a través de WhatsApp, 8.4%. Las redes sociales en general fueron mencionadas por 5.81%.
Y, según la encuesta del Observatorio, entre otros métodos utilizados para exigirles la extorsión, los encuestados mencionaron el uso de notas o cartas introducidas bajo la puerta de la casa o negocio.
“Este amplio espectro de métodos de contacto refleja la adaptabilidad de los extorsionadores al utilizar diversos canales de comunicación, tanto tradicionales como digitales, para ejercer su actividad delictiva”, señala la entidad.
Exigencias y formas de pago
Cáceres explicó que el 90% de los encuestados coincidió en que la principal exigencia fue dinero, mientras que al 10% restante le fueron exigidos bienes, firmar, suscribir, otorgar, destruir o entregar algún documento.
Esto incluye despojar de su vivienda o algún inmueble a la persona extorsionada.
Y, precisamente durante la semana el Ministerio Público dio a conocer un caso en que empezaron a desmantelar a una estructura criminal dedicada a extorsionar y a despojar propiedades, para lo cual efectuaron operativo el jueves 8 de agosto de 2024. Según esa entidad la red está vinculada a la pandilla del Barrio 18, operaba utilizando amenazas de violencia y extorsión para robar viviendas que convertían en guaridas en donde resguardaban armas y municiones, entre otros ilícitos. Al menos cinco inmuebles fueron recuperados durante las diligencias, se agregó.
Edgar Morales, Fiscal Adjunto de la Fiscalía contra el Delito de Extorsión, explicó a Prensa Libre que la estructura criminal empleaba un método de extorsión particularmente intimidante ya que aparte de un aparato de teléfono, dejaban una bala en el lugar, como un símbolo de intimidación.
Amenazas y medidas adoptadas
El 27% de las víctimas de extorsión optaron por cumplir con las demandas de los delincuentes, según reflejan los datos de la encuesta dada a conocer por el observatorio.
También refleja que la forma de negociación se hizo de diferentes maneras:
- El 40% respondió que fue de manera directa o personal y el 60%, fue a través de un tercero.
Y, del pago como los principales medios solicitados por los extorsionistas se mencionó:
- El 67% fue en efectivo; 23% los depósitos bancarios, 3% transferencias bancarias.
Es importante tener en cuenta que el 73% dijo que no concretó ningún pago por la exigencia y en los casos esto se queda como una amenaza, aspecto que es importante a la hora de determinar una sentencia, explica Cáceres.
En general, entre los detalles de las amenazas quienes han sido víctimas dieron a conocer que el 60% de los extorsionistas indicaron formar parte de una banda criminal, y el 64% de los extorsionadores proporcionó detalles precisos sobre la vida personal o familiar de la víctima.
Otra parte importante de esta medición, es que el 28% de quienes fueron extorsionados, indicaron que sufrieron represalias, y entre las formas más comunes:
- El 50% dijo que fue acoso e intimidación
- Los daños a la propiedad, afectaron al 46%
- Mientras que el 21% dijo que sufrió el asesinato de un familia
- Otro porcentaje igual mencionó la difamación y 17% publicación de contenido sensible
- En tanto el 13% indicó violencia física.
“Estos actos de violencia y vandalismo no solo generan miedo, sino que también buscan coaccionar a las víctimas para que cedan a las demandas de los extorsionadores”, se expresa en el documento del Observatorio.
Ante las amenazas y represalias, el 84% de los encuestados indicó que sí tomó alguna medida de protección que va desde cambio de ruta de movilización (29%); retiro o venta de su empresa o negocio (27%); cambio de lugar de residencia (26%); cambio de número de teléfono (24%); o el 8% que mencionó contratación de seguridad.
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“Además de estas medidas, algunas víctimas también mencionaron el aislamiento como una estrategia para protegerse”, en tanto “estos datos reflejan el alto nivel de disrupción que la extorsión puede causar en la vida de las personas, obligándolas a hacer cambios significativos en su rutina diaria y en su entorno personal y profesional para garantizar su seguridad”, es otro de los comentarios del observatorio luego del análisis de los datos.
Tiempo, denuncia y acción de autoridades
Del 70% que respondió haber sido víctima de extorsión, el 76% indicó que esta ya había finalizado, pero el 24% aún no.
Respecto al tiempo, este varió de forma significativa, ya que va desde casos aislados de un día, hasta situaciones prolongadas que se extienden por varios años con una amenaza de manera recurrente.
“Los periodos mencionados con más frecuencia incluyen 1 mes, 6 meses y 1 año, lo que indica que las extorsiones suelen ser persistentes y duraderas. Además, hay casos extremos de extorsiones que han perdurado hasta 5 años, lo que resalta la gravedad y el impacto a largo plazo de este delito en la vida de las víctimas”, refiere el análisis del Observatorio de Derecho de Propiedad, sobre los resultados de la encuesta mencionada por Cáceres.
Algo que vale la pena mencionar es por qué la gente no denuncia, y si denuncia que respuesta ha tenido, agrega la directiva.
- En este tema, el 63% dijo haber denunciado ante las autoridades, pero del 37% que no lo hizo mencionó razones como:
- Desconfianza en las autoridades y el sistema judicial (59%); temor a represalias por parte de los extorsionadores (47%); falta de pruebas (22%) y desconocimiento del proceso de denuncia (13%).
“Los comentarios adicionales de las víctimas refuerzan estas preocupaciones, indicando la percepción de corrupción dentro del Ministerio Público, la desestimación de las denuncias, y la falta de respuesta efectiva de las autoridades. Casos específicos mencionan la colusión entre la policía y los extorsionadores, y la falta de garantías de protección”, se detalla en el documento del observatorio.
Acerca de la respuesta de las autoridades ante la denuncia, según el ODP, el 52% dijo que no tomaron ninguna acción; en el 37% de casos indicaron que las autoridades abrieron una investigación sobre el caso; 35% mencionó que el caso fue cerrado sin resolución (ya sea archivados, o desestimados por las autoridades); el 15% expuso que las autoridades lograron identificar y tener a los delincuentes relacionados con el caso y el 13% que las autoridades proporcionaron protección a la víctima, agrega los resultados de la encuesta mencionada por el ODP.
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