En el caso Sepur Zarco el Ministerio Público logró condenas por los vejámenes que sufrieron 11 mujeres en el destacamento militar durante 1982 y 1983 en El Estor, Izabal, dijo la fiscal.
Aldana manifestó que “para conseguir justicia, las mujeres indígenas tuvieron que agruparse, organizarse y animarse a hablar. Un proceso nada fácil que contó con el acompañamiento de varias organizaciones mujeres”.
“El 26 de febrero 2016, las mujeres de Sepur Zarco obtuvieron una sentencia condenatoria, que por primera vez en la historia del país y uno de los pocos en el mundo, juzga crímenes de deberes contra la humanidad en la forma de violencia sexual, esclavitud doméstica y esclavitud sexual, condenando a los dos acusados –exmilitares- a 120 y 240 años de cárcel”, explicó Aldana.
La jefa del ente investigador detalló cómo se aplicó la justicia en el caso Sepur Zarco, “Verdad, Justicia, Reparación, No Repetición representan los cuatro pilares de la justicia de transición. El PNUD ha apoyado el desarrollo de las capacidades de la Fiscalía de Derechos Humanos del Ministerio Publico para perseguir penalmente casos de violencia sexual contra mujeres ”.
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Caso Sepur Zarco
El 26 de febrero último la Sala de Vistas de la Corte Suprema de Justicia fue el escenario de una condena histórica, el Tribunal de Mayor Riesgo A, condenó al teniente coronel Esteelmer Francisco Reyes Girón a purgar 120 de años de prisión y para el excomisionado militar Heriberto Valdez Asij, 240.
El tribunal encontró culpables del delito contra los deberes de la humanidad a los dos procesados, en este caso les impuso 30 años de prisión.
Con relación a la muerte de Dominga Coc, y sus dos hijas, Anita y Hermelinda, hecho ocurrido cerca de un río, el Tribunal le atribuyó el triple asesianto a Reyes Girón, lo condenó a 30 años de prisión por cada víctima. En total 90 años, más los 30, 120 años de prisión.
En caso de Valdez Asij, fue condenado a 240 años de prisión por delitos contra deberes de la humanidad y desaparición forzada.
El caso se originó por una denuncia que la Fiscalia recibió en el 2011. En el caso se describe que entre los años 1982 y 1983, al menos 15 mujeres Qeqchí fueron detenidas, llevadas al destacamento y esclavizadas.
Según la denuncia, las agresiones y violaciones duraron unos seis meses. Las mujeres también fueron obligadas a cocinar y hacer tareas de limpieza para los soldados.