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“Esto repercute en que no hay crecimiento en el número de agentes de la Policía, que sigue siendo bajo para el promedio que debería tener América Latina, lo que se traduce en una merma en los patrullajes policiales, en las acciones de prevención del delito y la violencia, en la asignación de nuevos elementos a nivel nacional y en zonas con alta incidencia criminal”, dijo Menocal.
El reclutamiento de aspirantes a policías en la actualidad quedó suspendido “por órdenes superiores” según la información brindada en la academia policial a los aspirantes a agentes, sin que hasta el momento haya una declaración oficial por parte del Ministerio de Gobernación.
A esto se suma que actualmente hay tres mil 174 reclutas de la academia de la Policía que llevan más de dos meses esperando su graduación para comenzar a trabajar dentro de las fuerzas de seguridad.
“Esto les afecta también a los aspirantes a nuevos agentes que ya terminaron su formación de 10 meses, porque evidentemente ellos esperaban ser asignados a las fuerzas de seguridad, lo que repercutirá en su situación laboral”, lamentó Menocal, quien fue ministro de Gobernación durante el gobierno de Álvaro Colom (2008 – 2012).
“Una decisión lamentable”
Adela de Torrebiarte, excomisionada para la Reforma Policial, coincide con Menocal en las consecuencias negativas que podría tener esa decisión.
“Es lamentable que ya no se haya hecho la convocatoria (….) y que esos procesos ya no sean continuados porque son políticas de Estado que no pueden cambiar, y que, por tanto, ya tienen presupuesto. El no continuar formando servidores públicos tendrá como consecuencia que la presencia policial vaya a continuar baja (…) lo que permite que para las organizaciones criminales sea más fácil seguir delinquiendo, porque que si no hay autoridad, obviamente eso le afecta a la sociedad guatemalteca”, dijo de Torrebiarte.
“Hay lugares alejados del país que sólo cuentan con tres policías; entonces, tres policías, por más que quieran hacer su trabajo, les es difícil, agregó la excomisionada, quien estuvo al frente de la reforma policial desde el 2012, y quien presentó su renuncia en mayo del año pasado, al considerar que no tenía el apoyo de las autoridades del Ministerio de Gobernación, encabezado por Enrique Degenhart.
Cobertura deficiente
Para el exministro de Gobernación Francisco Jiménez, el efecto más inmediato de esta decisión es una merma en la lucha por mantener la cobertura policial para el país.
“Hay que recordar que hay unos estándares internacionales que se suelen manejar sobre esto. Por 10 mil personas tendrían que dar cobertura un mínimo de 30 policías; en el caso de Guatemala, basados en los datos que da la misma institución, estamos como a 22 policías por 10 mil habitantes, lo que significa que tenemos un déficit de ocho”, dijo Jiménez, nombrado en el 2008 también ministro de Gobernación durante el gobierno de Álvaro Colom.
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Para el exministro, en términos generales “no estamos para nada bien”, debido a que esa cobertura de 30 agentes no podría ser la ideal para algunos territorios extensos o de alta incidencia criminal.
“No hacer la convocatoria significa que se va a detener el ingreso de nuevos elementos a la Policía, y no hacer esto significa en impactar en el objetivo que se ha tenido todos estos años de llegar por lo menos a ese objetivo de 30 policías por 10 mil habitantes”, advirtió.
“Administración caótica”
Menocal atribuye el problema en las filas policiales a una mala administración.
“Lo que veo es que en la administración de la Policía Nacional Civil hay una acción caótica por parte del ministro de Gobernación. Contrasta con el hecho que se estén dando destituciones o dándoles de baja a oficiales y comisarios que fueron formados durante muchos años, y que tienen experiencia en el combate al crimen en general, y que, por otro lado, no se incluyan a agentes nuevos que puedan trabajar en los patrullajes policiales”, expresó.
“¿Qué demuestra eso? que hay un caos, una desorganización. Yo no sé si es a propósito; creería yo que hay una intención seria y perversa de desmantelar la Policía”, agregó.
Incertidumbre en decisiones
De Torrebiarte cree que ese tipo de medidas en la Policía son una debilidad institucional, porque “una academia policial nunca puede parar”, por lo que esas decisiones no son temas de discusión, es algo que se tiene que hacer.
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“Llama la atención que todo eso, como los ascensos ordenados, los procesos internos, las pruebas de polígrafo, físicas y académicas que se venían dando son importantes. No se sabe quién está tomando las decisiones, porque, por ejemplo, para los ascensos hay un reglamento interno que se tiene que respetar, porque la Policía es una institución jerárquica”, ejemplificó.
Causa suspicacias
Jiménez dice que un punto importante es analizar el por qué se da esta decisión.
“No se explica si es una razón presupuestaria, que no creo que sea así y si lo es, cómo solventarlo, o hay detrás alguna otra perspectiva que no logramos entender porque no se ha dado ninguna explicación de por qué tomaron esa decisión.
Para Menocal, detrás de esta decisión hay “una perversa intención”.
“Resulta que en el Congreso hay una reforma a la Policía, que si se logra aprobar permitiría el ingreso de profesionales que no crecieron en la carrera policial a las fuerzas de seguridad, y evidentemente, ¿quiénes serían estos profesionales? Serían los militares que se les da de baja y que salen graduados del Ejército”, expresó Menocal, para quien una de las pruebas de esta intención es la destitución de altos mandos policiales, que eran especializados en temas específicos de criminalidad.
“No tengo información”
Consultado sobre el caso, el vicepresidente Jafeth Cabrera dijo a Guatevisión que no tenía información.
“De la PNC no tengo ninguna información, podrían avocarse al Ministerio de Gobernación para ver si hay una hoja de ruta en ese sentido. No sé si el representante del Ministerio tiene alguna información”, declaró Cabrera, que se dirigió al delegado de esa cartera, quien a su vez también dijo no contar con ella.
“Nosotros tenemos relaciones todos los lunes en el gabinete y allí planteamos la problemática, lo que pasa es que estos son temas tan específicos que en este momento no tengo la información, y ahora con lo que usted me está diciendo vamos de inmediato a tener comunicación con el Ministerio para saber qué esta pasando con esta situación que usted plantea”, agregó Cabrera.
Sin pronunciarse
Tanto el Ministerio de Gobernación como la Policía Nacional Civil, continuaban este jueves sin pronunciarse sobre el tema.
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