Las fincas estaban a nombre de supuestos testaferros de Chamalé, y luego de la sentencia del 25 de julio de 2014, fueron extinguidas a favor del Estado.
Las propiedades suman unos 25 millones de metros cuadrados, y estaban registradas a personas cercanas al capo, según se determinó en el Juzgado de Extinción de Dominio que ordenó la inmovilización de esos bienes.
Las fincas, cercanas a las playas de Ocós, habrían sido utilizadas para extraer los cargamentos de cocaína que eran arrojados al mar desde embarcaciones clandestinas, provenientes del sur del continente.
Las cinco fincas entregadas este viernes a la Senabed, se suman a ocho más que ya fueron entregadas el año pasado a la entidad para su administración.
Extraditado
Dentro del círculo del narcotráfico, Chamalé llegó a ser considerado el Amo del Pacífico.
Fue vinculado con el cartel de Sinaloa, dirigido por Joaquín el Chapo Guzmán, quien fue capturado el 22 de febrero último, en Mazatlán, Sinaloa, México.
Desde los 15 años, Ortiz López laboró como peón en una finca, donde aprendió el negocio de la droga.
Las autoridades guatemaltecas lo capturaron el 30 de marzo del 2011, en la colonia El Maestro, Quetzaltenango.
Ortiz López también era apodado Hermano Juan y en el expediente de una operación denominada Panamá Express destaca que era uno de los traficantes con más alto rango que operaba en Guatemala.
Chamalé fue entregado el 21 de mayo de 2014 a EE. UU. en extradición por las autoridades guatemaltecas, y agentes federales lo trasladaron por vía aérea a ese país.
La justicia estadounidense lo buscaba por conspiración para traficar cocaína en una embarcación y conspiración para distribuir droga.