Además, los magistrados señalaron que ellos no son quienes deben determinar si se debe cerrar el caso contra Igor Bitkov, Irina Bitkova y Anastasia, sino que corresponde a la misma jueza Éricka Aifán.
Con esta decisión, la jueza debe resolver en el plazo de 24 horas la situación, no solo de Igor Bitkov, sino también la de su esposa e hija, a partir de que las partes sean notificadas.
El tribunal también impuso una multa de Q1 mil a la jueza, por incumplimiento de esa resolución.
José Rolando Alvarado Lemus, abogado de los Bitkov, dijo que su cliente deberá quedar en libertad.
Igor Bitkov se expresó agradecido con la resolución de la Sala Tercera.
#LRN Estas son las palabras de Igor Bitkov luego de escuchar la resolución de los magistrados de la Sala Tercera de Apelaciones. pic.twitter.com/g6CL1g0M8u
— La Red (@Lared1061) May 22, 2018
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Según las pesquisas, la familia rusa ingresó en el país en 2009 y obtuvo documentos guatemaltecos por medio de una supuesta red que funcionaba en el Registro Nacional de las Personas (Renap) y la Dirección General de Migración, cuyos tentáculos aún investiga la Fiscalía.
Con la nacionalidad guatemalteca, Igor Bitkov se hacía llamar Gregorio Igor Benítez García, y la familia emprendió una serie de negocios, según los primeros registros que la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) envió al Ministerio de Finanzas, que datan del 10 de junio de 2009.
Los Bitkov han expresado en distintas oportunidades que empresarios allegados al presidente ruso, Vladimir Putin, “usurparon” sus bienes y al venir a Guatemala fueron “víctimas” de la red de falsificadores del Renap y Migración.
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La prensa rusa ha señalado que la familia poseía allá una empresa papelera valorada en US$700 millones y que, tras haber defraudado a sus accionistas por US$6 millones, se fugaron y llegaron a Guatemala.
Por ese caso, la embajada de Rusia en Guatemala volvió a solicitar el 17 último al Gobierno la extradición de Igor Bitkov e Irina Bitkova, por un presunto caso de fraude, y rechazó cualquier trasfondo político o la utilización de ese caso con otros fines, según una carta de esa misión enviada a Prensa Libre.
Enredo legal
El futuro de los Bitkov es incierto por no conocerce a cabalidad cuál sería el tipo de leyes que les serían aplicables, según la defensa de la familia.
El 15 de enero de 2015, el Ministerio Publico (MP) y la Comisión Internacional Contra la Impunidad (Cicig) destaparon el Caso Migración. La Policía allanó la lujosa vivienda de la familia rusa en carretera a El Salvador y los arrestó a los tres por los delitos de uso de documentos falsificados, usurpación de estado civil y supresión y alteración del estado civil. Fueron capturados junto a 40 migrantes, funcionarios del Renap y de Migración.
Desde entonces, Igor Bitkov se encuentra en prisión preventiva y su esposa, Irina Bitkov, e hija mayor, Anastasia, guardan prisión domiciliar.
En enero último, el Tribunal de Mayor Riesgo B, presidido por la jueza Yassmin Barrios, condenó a los Bitkov por los delitos de supresión de estado civil y documentos falsificados. Igor también fue sentenciado por el cargo de usurpación del estado civil.
Tanto Anastasia como Irina Bitkova fueron condenadas a 14 años de prisión y a una multa de Q100 mil, mientras que Igor Bitkov fue sentenciado a 19 años de prisión y una multa de igual cantidad que su esposa e hija.
Sin embargo, tres meses después, la Corte de Constitucionalidad anuló la condena contra la familia rusa, por lo que la causa debía volver al proceso de fase intermedia para decidir si enfrenta juicio.
El 9 de mayo último, la jueza Érika Aifán envió de nuevo a juicio a Igor Bitkov.
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