Los cuatro presuntos responsables están ligados a proceso, gozan de medida sustitutiva y el MP tiene tres meses más para fortalecer la investigación y sentar en el banquillo de los acusados a un hombre y tres mujeres responsables del hecho que se cometió, supuestamente, junto con 12 menores de edad que lanzaron piedras a las víctimas.
El caso de Aquino Pellecer y Galluser Loskot se derivó de diversos sucesos que ocurrieron aquel día en un centro de recreación en la ruta al puerto Quetzal en horas de la mañana que se extendieron hasta la tarde y noche. Los procesados fueron acusados por el MP del delito de homicidio en riña tumultuosa.
La información que documentó la PNC es que ese 13 de agosto, las dos víctimas mortales, según la defensa de los detenidos, llegaron a un turicentro en el kilómetro 74, ruta a puerto Quetzal.
En ese lugar, y en estado de ebriedad, agredieron físicamente a diversas personas, e incluso los acusaron de agresión sexual a una mujer que acompañaba a los procesados penalmente. Esto, según las pesquisas, motivó que hubiera una riña tumultuosa que se extendió más allá del centro de diversiones, según la defensa.
Sin embargo, el hecho se salió de control y las personas ligadas a proceso, persiguieron a ambos sujetos y los vapulearon, los hirieron con arma blanca, e incluso les lanzaron piedras hasta darles muerte.
Al llegar las autoridades a inmediaciones del kilómetro 74 hallaron a una de las personas muertas y el otro fue trasladado a un centro asistencial con heridas en la cabeza, pero murió en el ingreso a la emergencia.
De acuerdo con las investigaciones, los ahora procesados penalmente se trasportaban en un picop negro placas particulares 833KFY, y después de discutir con las víctimas, por los hechos que habían cometido, supuestamente, en el centro recreativo, los atacaron y apedrearon.
La fiscalía municipal de Puerto San José, Escuintla, investiga el hecho que ocurrió ese día, y en el que tras una discusión hubo una riña entre varias personas, incluidos menores de edad, y que dejó como resultado a las dos personas fallecidas por heridas de arma blanca y golpes contundentes.
Una rápida persecución de agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) logró arrestar a cinco personas, a quienes se les decomisó un arma blanca tipo bayoneta y una navaja. También fueron remitidos 12 niños, niñas y adolescentes, entre 3 a 17 años, quienes acompañaban a los procesados.
Ese día, 13 de agosto, las fuerzas del orden detuvieron a Elio Enai Diaz Mirón, Antonia José Solórzano Royan, Erika Oralia Yanet Recancoj López y a Griselda Acevedo Quevedo de Pérez, quienes horas más tarde fueron ligados a proceso por el delito de homicidio en riña tumultuosa y les otorgaron medidas sustitutivas. El juzgado fijó a la fiscalía un plazo de cuatro meses de investigación.
Aunque los matices son distintos, el último caso de linchamiento ocurrió en Sacapulas, Quiché. Esto sucedió el 16 de septiembre en aquella localidad.
En ese lugar unos mil 500 pobladores mataron a golpes y quemaron vivos a Víctor Manuel López Cifuentes, de 25; y José Alberto Gutiérrez Copen, de 23; ambos originarios del departamento de Guatemala. Los acusaron de haberle dado muerte a la comerciante María Marcela Lux Castro, de 47 años.
Puedes leer más acá: Quemados en Sacapulas: Cómo encontró el MP la escena del crimen y cuáles son las penas por linchamiento según la ley
