Las denuncias son investigadas por las fiscalías Especial contra la Impunidad y contra la Corrupción, del Ministerio Público.
Software dudoso
Los informes de auditoría que originaron las denuncias por los montos más voluminosos están relacionados con la adquisición de un software y programas digitales en los que predominó la opacidad de las adjudicaciones.
El hallazgo número 71 del informe de auditoría de la (CGC) del 2014 se refiere a las dudas en la contratación ofrecida por la empresa Nextec, S.A. por el servicio de digitalización de imágenes de planillas, por Q168 millones 200 mil.
El valor del servicio fue calculado en Q180 millones, pero según los auditores, no se siguió el procedimiento para saber si había otros proveedores autorizados; es decir, no se fundamentó que el precio fuera competitivo.
Nextec fue inscrita el 25 de agosto del 2003. El 1 de julio del 2014 suscribió un contrato con la empresa extranjera IP361, S. A., el mismo día que se publicó en Guatecompras la invitación a ofertar, y 20 días después se generó el pedido por el Departamento de Servicios Contratados.
La empresa apenas abrió cuentas bancarias en el país en junio de 2014, poco antes de que fuera otorgado el contrato.
Otro contrato
Otro hallazgo, el número 72, que originó una denuncia por Q250 millones 880 mil, está relacionado con la compra-venta de sistemas informáticos a la compañía Intellego SC (sucursal Guatemala).
El objetivo de contratar el servicio fue actualizar el sistema de gestión administrativa de recursos gubernamentales, garantizar la migración completa de datos y modernizar el sistema de atención médica. Al igual que en el caso de Nextec, S.A., fue estimado el valor del servicio en Q240 millones y otorgado por Q10 millones más, sin documentación que respaldara el incremento.
El 24 de febrero del 2014, tres meses antes de que Intellego recibiera la adjudicación, fue constituida la sucursal en Guatemala, con un capital de US$50 mil, y quedó inscrita el 14 de abril del 2014.
La empresa comenzó el proceso de registro tributario poco menos de un mes antes de que comenzara la licitación, incluso debió suscribirse un contrato ampliatorio, pues el original tenía errores en el nombre del representante, del proveedor y el valor en números del contrato, según el informe de la CGC.
Sin utilizar
En el Plan Operativo Anual del IGSS se había proyectado erogar Q550 mil para desarrollar ese programa, por lo que fue necesario hacer una millonaria modificación para garantizar el pago del contrato.
El 27 de marzo de 2015, ocho meses después de suscrito el contrato, los auditores detectaron que las licencias no habían sido utilizadas.
Se intentó contactar a Nextec y Intellego, sin embargo la primera no tiene registrado ningún número telefónico ni domicilio fiscal en Guatecompras y la segunda no respondió las llamadas.
Una tercera denuncia es por un proceso de adjudicación del que “no existen actas, por lo que se insertaron declaraciones falsas”, según la CGC. Fue por la contratación de derechos de uso de soporte técnico y las instalaciones de licencias perpetuas de manejador de base de datos del Seguro Social.
Pensiones
Entre las denuncias investigadas por la Fiscalía figura la de una trabajadora social que suscribió actas de supervivencia en el 2011, 2012 y 2013 al pensionado Jacinto Cruz, quien falleció el 6 de septiembre de 2010.
En el informe de 2014 y 2015 se ordenan sanciones económicas al IGSS por pagos a afiliados fallecidos, por no persistir grado de invalidez, incluso cuando el matrimonio de la beneficiaria con el afiliado ya no existía.
Según el informe de auditoría de 2014, el programa de Invalidez, Vejez y Sobrevivencia (IVS) transfirió Q462 millones 358 mil 29, de los que se recuperaron Q85 millones 179 mil 75 y quedaron pendiente de recuperar Q377 millones 178 mil 54.
Los auditores advirtieron en ese entonces acerca de la situación de “riesgo de recuperación de pagos improcedentes por la cantidad de Q329 millones 308 mil”.
Ambulancias
Desde el 2014, la Fiscalía contra la Corrupción conoció el proceso para la compra de 50 ambulancias, que comenzó el 27 de diciembre del 2013.
El jefe del Departamento de Servicios de Apoyo del IGSS hizo el pedido de 50 ambulancias al Departamento de Abastecimientos y consignó que el precio de estas era de Q880 mil, que coincide con el precio ofertado seis meses después por la Empresa Supplies Trading, S.A., por Q874 mil 743.
Dos meses antes, el 25 de octubre del 2013, en acta de asamblea de accionistas de la Empresa Supplies Trading, S.A., se autorizó la apertura de una sucursal filial o subsidiaria de esa sociedad en Guatemala, con un capital de Q50 mil.
La empresa quedó inscrita en el Registro Mercantil el 29 de enero de 2014 y la patente fue extendida el 13 de mayo del mismo año, “coincidentes con la fecha en que se realizaron las publicaciones para las manifestaciones de interés”, de acuerdo con los hallazgos.
Según el oficio 006820, del 27 de mayo del 2014, el jefe del Departamento de Abastecimientos solicitó a la Empresa Supplies Tradings, S.A. aclarar por qué presentó en su oferta documentos anteriores a la publicación del proyecto de bases.
“Se puede inferir que dicha entidad tenía conocimiento previo de que se daría el Proceso de Manifestación de Interés”, según la auditoría.
Conversiones Espaciales de México, la compañía que vendió las ambulancias a Supplies Trading, S.A., el 1 de enero de 2013, certificó que era la representante exclusiva de los vehículos, en una nota fechada el mismo día, 10 meses antes de que la empresa fuera legalmente constituida en el país.
Nuevos procesos
Carlos Contreras, presidente de la Junta Directiva del IGSS, reconoce que había “problemas graves de abastecimiento” por la integración de las juntas de licitación”.
Contreras afirmó que el resultado de auditorías internas y una comisión especializada fue la confirmación de la inutilización de procedimientos para la compra de medicina.
Ahora las compras de medicamentos se hacen con instrumentos de Naciones Unidas y se instaló una comisión que a partir de octubre, participará en “procesos intensos de adquisición” para evitar el desabastecimiento, según explicó Contreras.