El hecho más reciente ocurrió el pasado 31 de octubre en Gualán, Zacapa, cuando sujetos dispararon a dos agentes que acudieron al lugar de los hechos por denuncias ciudadanas.
Uno de ellos falleció en el lugar y el otro permanece en estado delicado por una herida de bala en la cabeza, confirmó la PNC, aunque que el día del ataque se informó que había muerto.
Jorge Aguilar, vocero del ministerio de Gobernación indicó que los vecinos denunciaron que dos sujetos con armas merodeaban por el lugar, por lo que alertaron a la PNC, y cuando los dos agentes llegaron para tratar de identificarlos, fueron recibidos a balazos. Uno de los agresores forcejeó con uno de los agentes y le disparó, como lo muestra un video que circula en redes sociales.
Según las investigaciones de la PNC, los supuestos responsables detenidos horas después, son sicarios y buscaban a una persona para ultimarla.
“Han muerto en el cumplimiento de su deber, pero también han sido emboscados en diferentes situaciones”, afirma Aguilar.
En marzo de 2016, el prófugo Óscar Oswaldo Archila Ovalle, alias el Rojo o el Dedotes, fue capturado en la aldea La Pepesca, Río Hondo, Zacapa, sindicado de haber asesinado al agente Marvin Juárez Carreto, cuyo cadáver fue localizado carbonizado en San Andrés Villa Seca, Retalhuleu.
Un año antes, el subinspector de la Policía Nacional Civil (PNC) Udín Haroldo Ramírez Barrios, de 41 años, murió baleado a unos cien metros de su vivienda ubicada en el caserío Piedra Blanca, Colomba, Quetzaltenango, cuando pandilleros le salieron al paso, lo despojaron de su arma de fuego y con la misma, le dispararon.
Venganzas
Expertos en seguridad y las propias autoridades de Gobernación han reconocido que muchos de los ataques hacia los agentes de la PNC ocurren por venganzas de estructuras criminales que identifican al personal que participa en los operativos para su desarticulación o porque los mismos elementos policiales se involucran con grupos criminales. Los críticos también han resaltado la falta de preparación de los uniformados sobre defensa personal.
En septiembre último, cuatro policías fueron señalados de pedir Q60 mil a una persona para entregarle un cabezal que fue robado el 19 de septiembre de 2023 en el departamento de El Progreso, según el MP.
El afectado accedió a realizar el pago en efectivo cuando le fuera devuelto el vehículo, por lo que acordaron reunirse para coordinar la entrega y fue en ese momento cuando fueron detenidos los agentes.
En ese mismo mes, en jurisdicción de Amatitlán, fueron detenidos un inspector y tres agentes del Grupo de Reacción Inmediata Motorizado Lobos Grill, cuando volvían con un piloto presuntamente secuestrado, a quien le exigieron Q20 mil para no consignarlo porque llevaba droga.
En 2014 en una finca de Sacatepéquez, el MP y la PNC efectuaron un operativo y detuvieron a 20 personas, la mayoría integraban las filas de la PNC y según las investigaciones, participaban en una banda criminal a la que se le denominó Sierra Obando, señalada de cometer 61 asesinatos.
Accidentes viales
Las estadísticas policiales también muestran que desde la fundación de la PNC, han muerto 138 agentes por accidentes de tránsito dentro del servicio, algunos percances se han dado mientras efectuaban persecuciones y fueron colisionados por otros vehículos o porque los agentes conductores perdieron el control del volante por exceso de velocidad.
También se han registrado los casos de 15 elementos que durante el servicio, decidieron quitarse la vida.
En descanso
Fuera de servicio han fallecido 519 agentes por arma de fuego. En junio de 2016, el detective Mauricio Leonardo de León Rodríguez, de 28 años, quien laboraba en la División del Programa Nacional Contra el Desarrollo Criminal de las Pandillas, fue ultimado en un restaurante de la zona 1 de Malacatán, San Marcos.
Algunos pobladores que presenciaron el ataque indicaron que un grupo de sujetos ingresó en el inmueble y disparó contra De León sin mediar palabra.
También se reporta la muerte de 378 agentes en accidentes de tránsito mientras se encontraban en descanso y 90 que se han quitado la vida, según las estadísticas.