“Las empresas se organizaron como sociedades anónimas para recibir el dinero del prepago y gozar del beneficio de los impuestos”, señaló el fiscal contra la Corrupción, Stuardo Campo, hasta ahora a cargo del caso, pues a partir del próximo año este quedará en manos de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci).
“Los dueños de buses que integraron cooperativas de transporte constituyeron las sociedades anónimas”, agregó. El monto del perjuicio al Estado es tan grande que ni siquiera ha sido cuantificado aún, comentó Campo.
Primer paso
Los artículos 3, 4 y 5 de la iniciativa del Congreso 4180 fueron un primer paso en el que se delimitaron 10 empresas que gozarían de exoneraciones de impuestos para importar equipos del sistema Prepago y de derechos arancelarios para la importación, por 60 meses, de tres mil 500 buses en la Ciudad de Guatemala, y más de 10 mil cien entre rutas cortas y extraurbanas.