Justicia

Militares en la frontera con México: Cómo el avance del cartel Jalisco Nueva Generación puede estar detrás de la violencia en San Marcos y Huehuetenango

El Estado debe actuar y fortalecer la seguridad en la frontera común con México para evitar que el Cartel Jalisco Nueva Generación cauce zozobra en la región.

Un militar y dos policías nacionales observan uno de los vehículos que abandonaron sujetos que atacaron la casa de la alcaldesa electa de Ayutla, San Marcos, Isel Súñiga, el pasado 20 de julio. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL).

Un militar y dos policías nacionales observan uno de los vehículos que abandonaron sujetos que atacaron la casa de la alcaldesa electa de Ayutla, San Marcos, Isel Súñiga, el pasado 20 de julio. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL).

Un exministro de Gobernación considera que México ha tomado la decisión de enviar a su ejército hacia la frontera común con Guatemala porque el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) avanza sin tregua hacia el país, eliminando a líderes de células de narcotraficantes locales que antes ocupaban plazas para llevar la droga hacia suelo mexicano y luego a los Estados Unidos.

En las últimas semanas han ocurrido incidentes violentos en Huehuetenango y San Marcos, los que se han cobrado la vida de personas, entre las que figura familiares de Eduardo Villatoro Cano, alias Guayo Cano, quien cumple una condena por más de 300 años por el asesinato de agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) en una subestación del municipio de Salcajá, Quetzaltenango, el 13 de junio de 2013.

El portavoz del Ejército de Guatemala, Rubén Tellez, confirmó la presencia de elementos castrenses mexicanos y guatemaltecos en la frontera común para enfrentar este problema actual.  Agregó que mantienen comunicación con las autoridades militares mexicanas respecto de esas operaciones.

“Se ha incrementado el dispositivo sobre el límite político internacional en esa región y también la cantidad y forma de patrullajes sobre el mismo”, agregó el vocero militar.

Añadió que el fin es “evitar el paso de personas desde ese país hacia territorio guatemalteco y que puedan alterar el orden y la seguridad en tierras guatemaltecas”. El último caso que les orilló a tomar esta decisión fue el ataque contra la alcaldesa electa de Ayutla, San Marcos. Se supone que fue un grupo armado mexicano vinculado con el narcotráfico.

El primer caso que encendió alarmas fue el que ocurrió el 17 de junio en el kilómetro 339, sobre el puente Selegua, en jurisdicción de Santa Ana Huista. En ese lugar fueron acribillados a balazos a Ana Leticia Villatoro Castillo, de 20 años y Sergio Otoniel Montejo Lorenzo, de 28. El crimen sucedió cuando volvía de un palenque en Nentón. 

El ministro de Gobernación, Napoleón Barrientos, aseguró que ellos prestan apoyo al Ejército en estos casos, pero que son ellos los encargados de proteger las fronteras de las organizaciones criminales trasnacionales. “Nosotros mantendremos nuestros dispositivos antinarcóticos en apresto ante esta situación”, resaltó Barrientos.

Para el analista en temas de narcotráfico y exministro de Gobernación, Carlos Menocal, hay un avance muy fuerte del CJNG y “están empezando a copar territorios que eran, o son todavía de narcos guatemaltecos”, explicó.

Según Menocal “han enviado hasta mensajes para advertir sobre sus acciones”. El exjefe de la cartera del Interior consideró que “si el Estado no toma el control vamos a tener escenarios muy violentos y como el que ocurrió contra la alcaldesa electa de Ayutla es algo de ello”.

Menocal explicó que se puede vivir algo parecido a la incursión de Los Zetas durante el tiempo en que era ministro de Gobernación, pero el problema ahora, expresó, es que no hay una reacción tan rápida como la que se dio en aquella ocasión.

Huehuetenango

El primer caso que encendió las alarmas ocurrió en Huehuetenango. Fue el 17 de junio en el kilómetro 339, sobre el puente Selegua, en jurisdicción de Santa Ana Huista. En ese lugar tuvo sujetos armados acribillaron a Ana Leticia Villatoro Castillo, de 20 años y Sergio Otoniel Montejo Lorenzo, de 28.

Se supone que regresaban de un palenque organizado en Nentón, y en donde también estuvo un hermano de Eduardo Villatoro Cano, narcotraficante que cumple condena por la masacre de policías en Salcajá, Quetzaltenango.

En el barrio El Campo, aldea (y frontera) La Mesilla del municipio de La Democracia, localizaron otros dos cadáveres. Uno de ellos es el de Jonathan Yordani Gómez López, de 27 y el otro el de Donaldo Saúl Villatoro Cano, de 47, hermano de Guayo Cano. 

De acuerdo con las primeras pesquisas el hecho se originó por una apuesta no pagada en el palenque organizado en Nentón. Todo esto ocurrió mientras que en la Frontera Comalapa, punto fronterizo cercano a la aldea La Mesilla del municipio de La Democracia, ya se habían escuchado incidentes violentos del CJNG y otras organizaciones criminales mexicanas que se resisten al avance de los primeros.

Un segundo hecho ocurrió cuando había finalizado el desfile hípico de Huehuetenango durante las Fiestas Julias en honor a la virgen del Carmen. Fue el 15 de julio a eso de las 17 horas cuando un comando que usaba armas largas y cortas atacó a un grupo de personas que habían participado en la actividad. Uno murió en la escena, en la zona 8 huehueteca. Fue identificado como Lázaro César Villatoro, de 52; y presunto primo de Guayo Cano, según las autoridades. 

Otras dos personas murieron en el Hospital Nacional de la localidad. Siete personas resultaron con heridas leves y fueron atendidas en el lugar por Bomberos Voluntarios que llegaron al lugar de la balacera.

Por este hecho las fuerzas del orden capturaron a Luis Armando Miz López, de 35 años; Luis Armando Mateo Méndez, 29; Josimar Benjamín Soto Cervantes, 28. y un adolescente de 17 años fue remitido hacia un juzgado especializado. Los tres adultos fueron ligados a proceso penal por asesinato, asesinato en grado de tentativa, portación ilegal de arma de fuego y allanamiento ilegal. Los enviaron a prisión preventiva.

San Marcos

En San Marcos, el otro departamento fronterizo con México, sucedió un incidente más. Este tuvo como protagonista a la alcaldesa electa del municipio de Ayutla, Isel Suñiga, quien es hija del fallecido edil de esa localidad, Erick Suñiga, quien se entregó a la justicia estadounidense para enfrentar cargos por narcotráfico.

El pasado 20 de julio a eso de las 2.15 horas un comando armado llegó a una residencia de la política en el cantón El Triunfo y dispararon en varias ocasiones. Eran por lo menos 1o individuos armados con fusiles quienes dispararon y luego huyeron rumbo al río Suchiate, donde abandonaron las camionetas y picop agrícolas para regresar a territorio mexicano. 

La alcaldesa electa, que funge en esta administración municipal como gerente, estaba dentro de la vivienda pero resultó ilesa. Un policía municipal que custodia a Suñiga fue herido de bala y llevado a un centro asistencial. Hasta ahora no se han revelado más detalles del caso, pero fuentes oficiales revelan que los casos podrían estar relacionados con grupos del narcotráfico mexicano que intentan incursionar en el país ya sin tener intermediarios.