La medida fue tomada debido a que la Fiscalía de Extinción de Dominio logró probar que el dinero que Muñoz captó provenía de comisiones ilegales.
De acuerdo con las pesquisas, el exsuperintendente cobró por priorizar el pago de crédito fiscal a empresas de Mario Roberto Leal y Giovanni Marroquín Navas.
“Existe la imposibilidad material para determinar qué parte del patrimonio (del señalado) es lícito y cuál es ilícito (…) por lo tanto, es necesario en este caso proceder a la extinción”, resolvió el juzgado.
Carlos Muñoz fue nombrado por Otto Pérez Molina como superintendente de la SAT en 2013 y estuvo al frente del ente recaudador hasta el 5 de enero de 2015
Involucrado en el caso La Línea, fue arrestado el 16 de abril de 2015, acusado de facilitar desde la Superintendencia de Administración Tributaria el control de las aduanas del país.
Según las pesquisas, tuvo conocimiento de la organización y no hizo nada por evitar involucrarse o denunciarlo. Terminó siendo un enlace con otros integrantes de La Línea.
Sus acciones dentro de la SAT beneficiaron a varios funcionarios aduaneros, sin los cuales no hubiera sido posible la operación de la estructura y él lo sabía, según las autoridades.
La extinción de dominio fue declarada por los siguientes bienes:
Cuentas
- Q60 mil 978.64
- Q31 mil 519.54
- Q22 mil 958.43
Cheques
- Q500 mil
- Q390 mil
- Q100 mil
- Q745 mil
- Q745 mil
- 3 millones 240 mil
Total
Q5 millones 835 mil 456.61