En adelante, a través de la línea 1561 se espera que los ciudadanos puedan contar con un canal de comunicación directo con la Policía para facilitar información sobre actos ilícitos en sus comunidades, con la certeza de que sus llamadas serán anónimas y tendrán un seguimiento e investigación.
El tener una línea de denuncias no es un intento nuevo. En el 2010 se abrió esta —1561— y años después, en el gobierno de Otto Pérez Molina, se institucionalizó como el programa Cuéntaselo a Waldemar, pero nunca se sistematizó la estrategia ni hubo capacitación al personal, por lo que tampoco se ofreció seguridad a los ciudadanos que hacían uso de esta herramienta.
Hasta ahora la línea ha estado abierta pero ha trabajado en medio de carencias, sin equipos tecnológicos y de trabajo suficiente para suplir la cantidad de denuncias que todavía ingresaban.
Edin Quezada, jefe de la División de Información Policial (DIP), explicó que con la organización Crime Stoppers Guatemala el centro de llamadas fue fortalecido para que se pueda capacitar a los agentes que reciben las denuncias.
Añadió que a esta línea se comunican personas que de forma confidencial aportan detalles de quienes cometen algún delito, denuncian maltrato infantil, venta de drogas al menudeo, extorsiones o asaltos, por ejemplo. Por esa vía actualmente reciben alrededor de mil denuncias por mes.
La información que llega a esa línea, según Quezada, les ha permitido identificar lugares donde hay armas escondidas, establecer el paradero de prófugos o incluso han facilitado la prevención de delitos.
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¿Cómo trabajarán?
El centro de llamadas tenía deficiencia en el personal y también en equipo tecnológico, debido a que solo contaba con dos agentes para recibir denuncias, las cuales se anotaban con papel y lápiz y luego se ingresaban al sistema.
Pedro Cruz, director de la oficina de Crime Stoppers en Guatemala, indicó que han trabajado muy de cerca con la PNC, desde 2017, con módulos de denuncias anónimas, pero a través de la Sección de Asuntos Antinarcóticos y Aplicación de la Ley (INL, en inglés) fortalecieron este centro de llamadas para convertirlo en la parte neural de la recepción de denuncias anónimas de la organización.
“Nosotros apoyamos a los policías en lo que necesitan, y continuaremos de la misma manera, haciendo ese acompañamiento. Comprendemos que no somos la ley, pero ayudamos a que se aplique”, resaltó Cruz.
Afirmó que las personas que denuncien tendrán la certeza de que no quedarán sus datos registrados y de que se guarda por completo el anonimato.
La información llegará a las autoridades a través de la línea telefónica o bien directamente a la página de www.tupista.gt. En ambos casos será totalmente anónima.
Luego, la información será analizada y verificada por unidades especializadas de la PNC, con el fin de direccionarlas a unidades específicas de la institución o el Ministerio Público.
Sin embargo, cuando la denuncia obligue a actuar de inmediato, los agentes la trasladarán lo antes posible para que se coordine un equipo que proceda para prevenir delitos, incidentes o salvaguardar la vida de una persona.
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Fortalecimiento
Cruz resaltó que fortalecieron el sistema del centro de llamadas y mejoraron la efectividad en el traslado de los datos que reciben a las direcciones específicas.
Quezada, por su parte, se mostró optimista con los cambios efectuados, ya que ahora contarán con un formulario electrónico para sistematizar en línea los datos y crear a la vez estadísticas.
Hasta hace algunos meses tenían tres equipos de trabajo, y ahora aumentaron a 10 operadores en dos turnos, para atender las 24 horas de cada día.
El jefe de la DIP explicó que, para lograr estos avances, la Policía invirtió el 50% y el resto provino de INL, a través de Crime Stoppers.
Los agentes de la PNC que atienden las llamadas son estudiantes de Psicología o de Recursos Humanos, además de que han recibido cursos de tratamiento y entrevistas a víctimas.