Jiménez, reelecto en 2013 hasta el año 2017, está acusado según la orden de captura en su contra de los delitos de criminalidad organizada y lavado de dinero, por su supuesta participación en un nuevo caso de corrupción dentro de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA).
La Fedefutbol ratificó hoy la suspensión temporal de Jiménez, prófugo de la Justicia desde el pasado viernes. A pesar de que este fin de semana las autoridades de Guatemala realizaron varios operativos para su captura no tuvieron éxito.
Sin explicación
Junto a Jimenez están señalados de corrupción Héctor Trujillo, magistrado suplente de la Corte de Constitucionalidad y secretario general de la Fedefutbol, detenido el viernes pasado en Estados Unidos y Rafael Salguero, exdirectivo de la FIFA.
Robinson también dijo que no puede explicar por qué no existe una orden de captura en contra de Salguero: “La verdad es el trabajo del Departamento de Justicia para solicitar las capturas y hasta ahora no hay nada nuevo sobre este caso”, dijo.
El exdirectivo de FIFA no se ha pronunciado sobre las acusaciones en su contra y tampoco las autoridades han dado ninguna información.
Según el informe del Departamento de Justicia de Estados Unidos, en marzo de 2010, Jiménez, en su cargo de presidente de la federación, aceptó junto a Trujillo, secretario general, y Salguero, uno de los tres representantes de la Concacaf en el Comité Ejecutivo de la FIFA, un soborno “de seis dígitos” por los contratos de televisión de los partidos de calificación para el Mundial de 2018.
En febrero de 2014, Jiménez y Trujillo negociaron con la misma empresa, Media World, un nuevo acuerdo por los derechos de televisión para la clasificación al mundial de Qatar 2022, por el cual ambos mandatarios recibirían un pago de US$200 mil.
Jiménez percibiría, según la investigación del Departamento de Justicia, otros US$200 mil adicionales.