La fiscalía determinó que el grupo, se identifica en Guatemala con la clave “Luis-Guatemala”.
La investigación detalla que esta estructura era contactada por migrantes originarios de Bangladés, Nepal, Pakistán, India, Somalia y Eritrea, que viajaban a Brasil, se movilizaban a Panamá y allí contactaban a los traficantes.
Según el Ministerio Público, los ahora detenidos cobraban aproximadamente US$2 mil 500 (unos Q19 mil) para trasladar a los migrantes de Panamá a México.
El traslado se realizaba por tierra a Guatemala, y después hacia México, con el fin de llegar a los Estados Unidos. La banda operaba desde 2009.
El grupo criminal fue identificado mediante una denuncia de la embajada de Estados Unidos, donde se evidenció que trasladaba anualmente a ese país a unas 500 personas.
Las órdenes de aprehensión fueron emitidas por el Juzgado de Mayor Riesgo B, los allanamientos se efectúan con apoyo de la PNC y la Unidad Especial de Investigación, agregada a la embajada norteamericana.