Justicia
Demuelen construcciones hechas por reos del Infiernito y hallan caletas
Autoridades de Gobernación aseguran que la cárcel del Infiernito retomará el modelo de máxima seguridad, por lo que modificaciones hechas por los reos fueron demolidas.
Luego de que autoridades del Ministerio de Gobernación tomaran el control del Centro de Máxima Seguridad Canadá, conocida como El Infiernito, en Escuintla, y trasladaran a 225 pandilleros del Barrio 18, este lunes 3 de junio se demolieron algunas construcciones hechas por los reos y se buscaron caletas, informaron fuentes oficiales.
El pasado domingo, la Policía Nacional Civil (PNC) trasladó a los 225 pandilleros que estaban internados en El Infiernito, donde tenían televisores, refrigeradores, animales salvajes como cocodrilos y hasta un "call center" para extorsionar y ordenar crímenes, según Gobernación.
"Ya no hay ni un solo reo en el presidio 'El Infiernito'. De nuevo esta cárcel es del país. La vamos a reestructurar para que ahora sí sea una cárcel de máxima seguridad", escribió en su cuenta de X el ministro de Gobernación, Francisco Jiménez.
"Será repoblada. Eso sí, de acuerdo a su condición de privados de libertad. Son prisiones, NO vacaciones", agregó en alusión a las comodidades que tenían algunos de los internos.
Según imágenes oficiales, los reos tenían aire acondicionado, televisores y refrigeradores.
Ademas, encontraron animales de granja como pollos y gallinas, y una pileta con cocodrilos, agregó el ministro en un video compartido en X.
En una requisa anterior, la policía desmanteló en el penal una especie de "call center", con teléfonos celulares y conexiones de internet, entre otros equipos.
Caletas
Este lunes, las fuerzas de seguridad continuaron con el operativo en esa prisión y sus esfuerzos se encaminaron a la búsqueda de caletas en paredes y pisos, según se informó.
”Encontramos decenas de celulares, dinero, armas blancas, licores, routers y otros en las primeras 4 caletas localizadas. Este es el resultado de décadas de descontrol”, escribió Jimenez en la misma red social.
Además, se informó que este lunes se demolieron algunas construcciones que los reos hicieron a lo largo de los años, como paredes con tabla yeso, un minizoológico y un parque infantil.
“Para nosotros los controles sobre estos privados de libertad se ha hecho complejo estos meses, porque al estar separados implica una serie de mecanismos que dificultaban. Hoy por hoy, el unirlos también tiene la característica de poder generar mejores controles sobre ellos”, agregó Jiménez en alusión que los reos de El Infiernito fueron llevados a un penal en la capital.
Fauna
En el operativo de traslado que contó con 400 policías, también participaron agentes de la División de Protección a la Naturaleza (Diprona) de la PNC, al encontrar animales salvajes.
Entre los animales rescatados figuran cocodrilos, mapaches, zorros grises, gavilanes y aves de rapiña, entre otros, lo cual "evidencia el completo descontrol en el recinto", lamentó el ministro.
Ahora las autoridades buscarán un lugar adecuado para el resguardo de esas "mascotas" e identificar a "los responsables de ingresar estos productos y animales exóticos" a esa cárcel.
La viceministra de Seguridad, Claudia Palencia, coincidió con Jiménez al responsabilizar a "los gobiernos anteriores" de "ceder a los criminales" el control de las prisiones.
Para Palencia, quien hizo un recorrido por la cárcel con periodistas tras retomar el control, el abandono desde hace más de tres décadas permitió a "los reos tener una posibilidad de estar cómodos en este centro carcelario".
"El sistema penitenciario es al único que no se le ha dado una reingeniería, ni en infraestructura, ni de tecnología, ni de dignificación a los guardias, ni una reforma", lamentó.
"Primero vamos a encontrar todas las caletas (espacios ocultos para guardar dinero, armas de fuego o celulares), así tengamos que botar todas las paredes y levantar todo el piso y después la vamos a convertir en una verdadera cárcel de máxima seguridad, con controles estrictos y uso de tecnología", aseveró el ministro Jiménez.
La operación se realizó tres días después de que el presidente Bernardo Arévalo reconoció que zonas de la capital viven "prisioneras" de las pandillas, al reaccionar a un llamado de la ONU para que frene el reclutamiento de menores por parte de esas bandas.