En México los negocios formales que comercializan pollo, huevo y pavo han urgido a sus autoridades frenar el avance de la gripe aviar AH5N1 porque esto generaría carestía antes del Día de Acción de Gracias de Estados Unidos y las fiestas decembrinas, época en que el consumo crece.
Igual situación ocurre en Guatemala en donde desde el 4 de noviembre el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga), lanzó la alerta y ordenó instalar un cordón epidemiológico para evitar contagios en aves de granjas nacionales.
Hasta ahora, según el Maga, no hay ningún caso en el país, pero los controles se mantienen para evitarlos. En México, según el gobierno federal, hasta ahora el virus lo han hallado en cinco granjas comerciales, tres de ellas en el estado de Sonora, otra en Nuevo León y una más en Jalisco.
Pero también en tres explotaciones de traspatio en Chiapas, fronterizo con Guatemala, Chihuahua y el estado de México. El total de aves afectadas en el país vecino es de 852 mil aves, que han sido sacrificadas.
La enfermedad afecta a Europa, Asia, África y América. En Europa han sacrificado a 52 millones de aves. Mientras que en Canadá y Estados Unidos, han sacrificado más de 50 millones de aves.
Datos del Maga revelan que avicultura en Guatemala tiene una población de 83.2 millones de aves. El 68 por ciento de estas corresponde a la avicultura tecnificada y el 32 por ciento a la de traspatio. Y ahí radica el riesgo.
De acuerdo con la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) registrados en el Sistema Mundial de Información Sanitaria (WAHIS, en inglés) entre enero y septiembre de 2022 se han registrado en el mundo dos mil 679 brotes de gripe en aves de corral, con mayor prevalencia en Europa y Estados Unidos.
Precaución
El Maga alertó a inicios de noviembre por un caso que se detectó en octubre en México y otro más en Colombia.
El director del Programa Nacional de Sanidad Avícola (Prosa) del Viceministerio de Sanidad Agropecuaria y Regulaciones (VISAR),
Julio Cordón, informó que esta alerta establece redoblar los controles e inspecciones de personas y transportes en puertos, aeropuertos y fronteras terrestres a fin de evitar que ingresen aves y productos avícolas procedentes de los países con presencia de la enfermedad.
“Guatemala no tiene ningún caso de influenza aviar hasta hoy. Si detectamos aves o productos avícolas sin los permisos correspondientes serán decomisados e incinerados de inmediato”, dijo Cordón.
Contrabando
Ante ese panorama lo que más preocupa a las autoridades guatemaltecas es el contrabando de pollo vivo desde México.
Alejo Campos, director regional de Crime Stoppers, programa comunitario que ayuda junto con la Policía Nacional Civil (PNC) a las personas a proporcionar información anónima sobre actividades delictivas, aseguró que la época es propicia para que se incremente el contrabando de pollo vivo desde México hacia Guatemala.
Pero alertó que la presencia de gripe aviar en Chiapas aumenta los riesgos para el consumidor local. “El problema que tiene Guatemala en el aumento de pollos vivos que vienen desde la frontera mexicana es que ponen en riesgo a las aves legales que se crían en las granjas, próximas a las zonas fronterizas con México”, dijo Campos.
El director regional de Crime Stoppers, agregó que los pollos ingresan vivos en forma ilegal y luego los mezclan, para ocultar el origen ilegal, en granjas de traspatio locales.
“El problema es la gripe aviar que está en México desde octubre. Una granja se contamina y al final esas aves se sacrifican. Debido a las fiestas de fin de año esto aumenta y dañar la producción legal, local, por aves enfermas que ingresan en forma ilegal, generaría un impacto económico y desabastecería el mercado nacional”, aseveró Campos.
Otro problema, comentó Campos, es que los pollos que vienen desde México son de descarte, no aptos para el consumo mexicano, y las granjas de aquel país hallaron una opción para venderlo en Guatemala.
Los contrabandistas de pollo, que obtienen una ganancia de casi Q400 millones al año, usan puntos fronterizos no controlados en San Marcos y Huehuetenango.
En el primer departamento, los principales puntos ciegos de ingreso son las aldeas Gracias a Dios y La Mesilla, de Nentón y La Democracia, respectivamente, donde la presencia del crimen organizado es alta.
En esos puntos, según datos del Consejo Interinstitucional para la Prevención y Combate a la Defraudación Fiscal y al Contrabando Aduanero (Coincon) ingresan entre 150 mil y 170 mil animales cada semana. Mientras que en el río Suchiate, principal punto ciego en tierras marquenses, ingresan de 120 mil a 150 mil aves.
La comercialización ilegal de pollo vivo representa un 10% del total del contrabando de alimentos, cuyo porcentaje ya supera al trasiego de huevos y genera ventas fraudulentas millonarias, según datos de la Comisión de Defensa del Comercio Formal (Codecof), de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG).