En un mes, la Corte Suprema de Justicia y las cortes de Apelaciones cumplirán un segundo año consecutivo de que el sistema de justicia no renueva a sus más altos cargos, lo cual deja en una crisis al sistema de justicia, debido a que los funcionarios cumplirán siete años de estar ejerciendo la magistratura.
Sin embargo, aunque pareciera que es mucho tiempo sin la renovación de cortes, este proceso parece que lleva camino de extenderse por mucho más, y podría llegar, incluso, hasta la elección del próximo fiscal general, según han advertido analistas en seguridad y justicia.
David Gaytán, consultor en temas de justicia y transparencia, dijo que el sistema de justicia del país está atravesando una crisis relevante y pone en duda el sistema republicano de los tres poderes del Estado, ya que el Organismo Judicial está afectado porque en casi dos años no ha habido elección de cortes.
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“Para entenderse, es como si el presidente se quedara en el cargo dos años más, porque es exactamente lo que está pasando con el sistema de justicia”, destacó Gaytán.
El abogado criticó que el Congreso se siente cómodo con los magistrados actuales que ocupan la Corte Suprema y Apelaciones. También indicó que durante dicha administración no se ha solucionado el retraso para resolver los expedientes que ingresan al sistema de justicia, y la creación de nuevos juzgados tampoco ha reducido el tiempo para conocer estos procesos.
“El aspecto más preocupante es que hemos observado cómo el Ejecutivo y el Congreso han intentado cooptar el sistema judicial, y lo han logrado, colocando a personas afines en los cargos judiciales y esto desvirtúa la función de uno de los poderes”, expresó.
Lizandro Acuña, investigador en temas de seguridad y justicia, coincidió en que el sistema judicial vive una crisis, porque el Congreso no ha elegido a los sustitutos de las cortes. Añadió que debido a que este tema genera desconfianza de la población hacia los diputados, porque estos utilizan cualquier excusa para no efectuar la elección.
CC es la responsable
Stuardo Ralón, presidente del Centro para la Defensa de la Constitución (Cedecón), sí reconoce una creciente mora judicial, no responsabiliza al Congreso de esto, más bien arroja la culpa a la anterior magistratura en la CC de imponer un mecanismo leonino, casi imposible de cumplir.
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“Hemos tenido una prolongación irregular y el Congreso ni vota como debería votar a viva voz, uno por uno y razonando por cada uno de los candidatos, lo cual podría demorar un año y medio o dos años más, según el procedimiento irregular establecido por la anterior Corte de Constitucionalidad”, afirmó.
Ralón indicó que no es la falta de elección de las cortes lo que ha generado más mora judicial, porque las magistraturas siguieron trabajando sin detener sus actividades, más bien fue la paralización del Organismo Judicial por la pandemia la que provocó el aumento de la presa judicial.
Movimientos en el MP
En el otro extremo está el Ministerio Público, que en los últimos meses, por decisión de la fiscal general, Consuelo Porras, ha rotado a varios jefes fiscales hacia otras fiscalías; uno de los cambios más mediáticos fue en la Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci), pero han sido muchas más fiscalías en las que se han hecho los movimientos de personal.
Sobre esta situación Ralón señaló que siempre ha habido traslados administrativos en el Ministerio Público, y como ciudadano espera que generen mejorar la labor de la institución y no un retroceso. En el caso específico del exfiscal Juan Francisco Sandoval, de la Feci, reiteró que deben agotarse los procedimientos legales que están en curso por el proceso de reinstalación, por lo que espera que se lleven a cabo respetando el debido proceso.
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Para Lorena Escobar, coordinadora del Departamento de Análisis Jurídico de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), el no fundamentar los traslados y rotaciones en el Ministerio Público genera un desgaste y desconfianza hacia la institución.
“El sistema de justicia siempre ha tenido sus debilidades y fortalezas. Lo que vemos en algunos casos, porque no se puede hablar en general, es que tiene luces y sombras, y el servicio que presta se ha visto cuesta arriba durante la pandemia y en esta falta de voluntad por parte de los diputados para elegir a los magistrados”, reiteró Escobar.
