El proceso se repite luego que el exfuncionario guatemalteco apelara la sentencia emitida el 6 de junio de 2014, cuando se condenó a cadena perpetua.
Uno de los testigos propuestos por la defensa de Sperissen, era la del expresidente Óscar Berger, el exvicepresidente Eduardo Stein, Frank LaRue, excomisionado presidencial para los Derechos Humanos.
Sperisen tiene doble nacionalidad, suiza y guatemalteca, y la justicia de aquel país no tiene prevista la extradición de sus ciudadanos, pero sus tribunales tienen la competencia de juzgar crímenes cometidos por sus nacionales en otros países.
Sperisen es uno de los tres antiguos altos cargos cuya captura internacional pidió un tribunal guatemalteco tras ser acusados por la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala de integrar una estructura criminal dedicada a las ejecuciones extrajudiciales de prisioneros.
Tras el asesinato de parlamentarios salvadoreños por parte de las fuerzas de seguridad de Guatemala en 2007, Sperisen renunció al cargo y, hasta que fue detenido en 2012, se instaló en Ginebra, en la residencia de su padre, embajador de Guatemala ante la Organización Mundial del Comercio.
Con información de agencia EFE
