Las muertes violentas en el país casi en su mayoría están relacionadas con un arma de fuego. El Inacif reportó que la primera causa de muerte violenta en personas es por heridas de bala, durante 2018 registró tres mil 487 necropsias por esta razón.
En 2019, 29 mil 165 armas fueron registradas para tenencia por personas individuales -incluye el dato de Digecam y el extinto Departamento de Control de Armas y Municiones, según el vocero del Ejército-, a las que se deben sumar 22 mil 39 armas registradas por personas jurídicas, entre las que se incluye empresas de compra y venta, de seguridad privada, entidades del Estado, embajadas, empresas comerciales y sociedades anónimas.
El dato de 116 armas al día registradas por personas individuales se obtuvo después de dividirlas entre el total de días hábiles en que la Digecam atiende (250 al restar los asuetos, ya que abre de lunes a viernes). Esta cifra refleja un incremento del 20.97 por ciento, comparado con 2018, donde se registraron 24 mil 109 tenencias de armas para personas individuales.
El aumento ha sido sostenido desde 2015, cuando se inscribieron 14 mil 806 armas de fuego a nombre de personas individuales. Es decir, en cuatro años subió casi el doble.
¿Qué significan que existan tantas armas registradas para tenencia? Guatemala está entre los países que tienen vigente el derecho constitucional para portar y mantener armas, otro de los países es Estados Unidos. El Estado no regula cuántos artefactos podría tener y portar una persona, ya sea extranjero o guatemalteco.
“En el país desde 2010 a la fecha tiene un descenso de homicidios, el problema es que, los más afectados de la delincuencia en su patrimonio o vida son los ciudadanos. Tienen menos recursos y la única alternativa es tener un arma para defender su hogar o su actividad fuera de su casa”, advirtió Mario Mérida, coronel retirado del Ejército.
Expertos en seguridad ciudadana coincidieron que el aumento del registro de tenencia de armas podría estar relacionado con la percepción de violencia, que tienen los ciudadanos en el país. Pero también podría estar asociado a la actualización del registro de los artefactos con las reformas aprobadas a la Ley de Armas y Municiones mediante el Decreto 6-2017.
Por esta disposición, la Digecam reportó que, hasta el viernes 24 de enero, 172 mil 312 armas fueron actualizadas y el objetivo era registrar 383 mil 658 hasta el pasado viernes 31 de enero, cuando vencía el plazo del Decreto.
Registros flexibles
“El aumento de registro de armas de amas para tenencia podría responder en la flexibilidad de los exámenes que realiza la Digecam para este trámite”, opinó Carmen Rosa de León, directora del Instituto de Enseñanza para el Desarrollo Sostenible (Ieapades).
Añadió que también podría significar que muchas personas que optan por un empleo registran su arma para ser contratados por empresas de seguridad privadas. “En una investigación que realizamos, encontramos que muchas personas los contratan con armas, sin que cumplan todos los requisitos”, indicó de León.
Según las encuestas realizadas por la institución, a las personas no les gusta las armas, es decir no tenerlas y tampoco portarlas como mecanismo de defensa; es más, piden mayor seguridad por parte de la Policía Nacional Civil (PNC), explicó la experta.
De León criticó que es absurdo creer que cuando los índices de homicidio están en reducción y la percepción de violencia también, la motivación principal para los ciudadanos de armarse sea por seguridad.
“Para mí en todo caso, podría haber más gente involucrada en narcotráfico o crimen organizado y contratan a las personas a nivel local porque tienen armas”, advirtió.
El dueño de una armería registrada ante la Digecam en el Oriente, de quien por seguridad se omite el nombre, explicó que las personas individuales son las que generalmente compran armas cortas, por ejemplo: pistolas y revólveres para que sean contratados para ser custodios o guardaespaldas.
Añadió que, las armas para cacería como rifle también son algunas de las más compradas por personas que tienen preferencia por la cacería como pasatiempo.
¿Quiénes pueden registrar armas?
Juan Carlos de Paz, vocero del Ejército, explicó que la institución recibe durante el horario laboral las armas y solicitudes de registro que presentan las personas, sean extranjeros o guatemaltecos. Añadió también que las jurídicas, quienes comprenden compañías de compra y venta, de seguridad privada, entidades del Estado, embajadas, empresas comerciales y sociedades anónimas también presentan sus solicitudes.
De Paz añadió que para que el arma sea devuelta a sus dueños, pasan entre tres y cuatro meses, después de verificar que toda la documentación esté en orden.
¿Por qué las registran?
Según los registros de la Digecam en 2018 se registraron 4 mil 929 armas más que en 2017. El antropólogo y politólogo, Ricardo Sáenz de Tejada, coincidió también con Mérida, en que el registro de los artefactos podría ser por la inseguridad que se percibe en el país.
Héctor -nombre ficticio por seguridad- es un abogado que tiene 40 años, contó que desde hace siete años porta un arma, después que su hermano murió en un ataque armado.No sale a ningún lado sin ella porque se siente “indefenso” y “desprotegido”.
“Ahora matan a las personas durante un robo de celular por alguna extorsión. Sé que puedo portar un arma porque es un derecho constitucional y me armé. Estoy tan acostumbrado a cargarla que cuando por alguna razón la olvido, me siento indefenso, desprotegido e incompleto”, refirió.
El analista Mérida explicó que, aunque los ciudadanos adquieren sus armas para seguridad, no dejan de estar en riesgo, porque durante su defensa podría recibir una respuesta violenta del atacante, se puede explicar que portar o tener un arma para defensa propia tiene doble vía.
“La percepción que tiene el ciudadano es que está solo enfrentándose a la amenaza contra su vida y busca el arma para sentirse seguro”, añadió el experto en seguridad.
Importaciones de armas y municiones
De acuerdo con el registro del Banco de Guatemala (Banguat), las importaciones de armas y municiones significaron US$53 millones 242 mil 366 —más de Q407 millones— entre enero de 2015 y noviembre de 2019 para el país.
Con base en esos registros se estableció que la adquisición de armas y municiones se ha mantenido en crecimiento, con excepción del 2016, cuando bajó.
En 2015, esas transacciones sumaron US$10 millones 128 mil —unos Q77 millones 479 mil 200, al tipo de cambio de ese año—.
Los datos reflejan una baja de US$126 mil 937 en 2016 al comparar el total de importanciones del año anterior.
Mientras que para 2017 se reportó de nuevo un incremento de US$754 mil 818 comparado con los US$10 millones mil 256 del 2016.
En el 2018 superó en US$691 mil 698 lo comparado en 2017 -US$10 millones 756 mil 74— y el año pasado -hasta noviembre- se reportó un descenso de US$538 mil 261, comparado con el total 2018.
Relación de armas con homicidios
Las muertes violentas en el país casi en su mayoría están relacionadas con un arma de fuego. El Inacif reportó que la primera causa de muerte en personas es por heridas de bala, durante 2018 registró 3 mil 487 necropsias por esta razón.
El ente científico reportó que en 2017 fueron realizadas 3 mil 884 necropsias por proyectiles de armas de fuego. Pero según una encuesta que menciona la directora de Iepades, las personas tienen sentimientos negativos sobre la tenencia y portación de armas.
El Inacif tipifica como segunda causa de muerte las heridas por arma blanca, ya que durante 2017 fueron realizadas 469 necropsias y el año siguiente 409.
Mientras que la tercera causa de muerte fue por asfixia por suspensión, ya que fueron realizadas 423 necropsias en 2017 y en 486 en 2018.
Para la experta en seguridad ciudadana, la proliferación de armas de fuego en un país siempre está asociado con violencia homicida y heridos por armas de fuego, porque en el país no existe un control para las armas.
Mientras que Mérida explicó que el perfil ideal para que una persona porte un arma de fuego, debería de ser de alguien que está consciente que es una “gran responsabilidad” y con un control emocional fuerte.
“Con todo el nivel de tensión que vive la gente, la respuesta a una situación violenta no es racional, sino más bien emocional. Respondiendo al nivel de riesgo que piensan tener en ese momento”, indicó el experto.
¿Dónde se registran más armas?
Carlos Mendoza, investigador de Diálogos, explicó con base a una investigación realizada para Plaza Pública, que las regiones donde más se registraron armas para tenencia y portación entre enero de 2009 hasta abril de 2018, fueron Guatemala, Zacapa, Jutiapa, El Progreso, Santa Rosa, Chiquimula, Petén, Izabal, Escuintla y Jalapa.
“En el Oriente del país tiende a existir una mayor aceptación social de las armas y la socialización incluso de los hombres jóvenes. Se nota que, en los municipios más violentos, en donde hay más licencias de tenencia como de portación”, agregó Mendoza.
Marlon, un vecino de Jutiapa, que tiene 55 años, contó que ha tenido más de tres armas en su vida. Las ha comprado para cazar iguanas u otros animales y así alimentarse de vez en cuando, según narró. Ahora usa un rifle que está registrado ante la Digecam para portarlo y no solamente tenerlo en casa. La última vez que lo utilizó fue el pasado jueves 30 de enero cuando fue a cazar con algunos amigos. El vecino añadió que, las anteriores armas que tuvo las vendió.
Alex, uno de los cientos de propietarios de armerías que está registrado ante la Digecam en Petén, explicó que varios de sus cliente compraron rifles en los últimos años para cuidar sus “parcelas” y sus “propiedades”. Añadió que durante los últimos años las ventas se han mantenido. Por algunos meses aumentaron las compras de sus clientes, pero fueron más por municiones”.
Armas en alquiler
Jerson Aldana, jefe interino de la Dirección de Investigación y Desactivación de Explosivos (DIDAE) de la PNC, explicó que, según sus investigaciones, han determinado que los ciudadanos han registrado sus armas en los últimos años para “ponerlas a trabajar”.
Los artefactos podrían ser alquilados por los dueños hasta por Q500 al día a terceras personas como a mareros o sicarios, quienes las utilizan para asesinar personas, pero antes de arrendarlas denuncian ante las autoridades que su arma se extravío o fue robada para salvarse de alguna responsabilidad penal.
Aldana añadió también que han localizado armas que son de Guatemala en El Salvador, esto podría indicar que legalizan las armas para intercambiarlas en los países y delinquir con ellas en otros lugares.
De León coincidió con Aldana e indicó que también identificaron que las personas legalizan sus armas para pasarlas en fronteras por medio de tráfico “hormiga”.
El jefe de la DIDAE añadió que los lugares en donde más se registran las tenencias de armas son: ciudad capital; Petén, Escuintla y el Oriente del país. Las investigaciones de la División establecieron que, las armas largas como fusiles o rifles son utilizados por los narcotraficantes, secuestradores y crimen organizado. Mientras que las armas cortas como pistolas son usadas por los mareros o la delincuencia común.
Para el antropólogo Sáenz de Tejada, el fracaso del Estado para garantizarles seguridad a los ciudadanos ha creado una cultura de autodefensa, porque podría entenderse que existen muchos civiles armados comparado con las fuerzas de seguridad.
“Es indispensable fortalecer los requisitos en la tenencia de armas de fuego y el control de las municiones”, añadió.
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