Stalling está vinculada al caso Tráfico de Influencias, por supuestamente aprovecharse de su posición para presionar al juez del Tribunal Noveno de Sentencia, Carlos Ruano, que conocía el caso en el que está involucrado su hijo, Otto Molina Stalling, acusado de asociación ilícita y cobro de comisiones en el Seguro Social.
Sin embargo, la exmagistrada había logrado dejar fuera, por medio de un amparo, pruebas importantes para el caso, como videos, llamadas telefónicas y testimonios.
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La Feci, entonces, planteó una apelación para reincorporar y validar los indicios referentes al caso, como las referidas declaraciones en anticipo de prueba.
Stalling, que fue separada de su cargo como magistrada en la Corte Suprema de Justicia, fue denunciada en a principios del 2017 por el juez Ruano, debido a que, supuestamente, intentó influir en él para que resolviera a favor de su hijo Molina Stalling, quien era señalado en casos de corrupción en el Seguro Social.
La exmagistrada fue capturada el 8 de febrero de 2017, cuando llevaba una peluca, lentes oscuros y un arma de fuego.
